El viernes en la tarde, despu�s de almorzar me di un ba�o y
me puse un short cachetero color amarillo, en Ecuador se le llama as� porque
deja al descubierto la parte inferior de las nalgas o los cachetes, es decir que
son para cuando una quiere provocar a un hombre, una blusita negra muy peque�ita
y la infaltable tanguita, esta vez era amarilla. Como les repito, he descubierto
que cada que me lo pongo, mi marido irremediablemente me hace el amor. Ahora
siento la necesidad que me satisfaga casi todos los d�as y la verdad es que me
preocupa porque unas veces me dice que est� muy seguido.

Esta tarde, al entrar �l al cuarto (yo estaba acostada boca
abajo haci�ndome la dormida), sent� que se par� a mi lado observ�ndome. Se
desvisti�, fue al ba�o y empez� a besarme la parte de mis nalgas que no estaban
cubiertas por el short. A su contacto me "despert�" y nos saludamos con un beso
en la boca ( a m� me gusta besar sacando un poquito la lengua mojada en saliva,
eso parece que enloquece a los hombres). Lamentablemente mi marido por el
cansancio que tra�a y posiblemente la preocupaci�n de no poder complacerme
totalmente, motiv� que no respondiera como otras veces dej�ndome picada y con
m�s ganas que antes de empezar, simplemente atin� a decirme que hacer el amor
todos los d�as era muy agotador y que si yo quer�a me compraba un consolador
(esto �ltimo lo dijo en broma), pero yo le segu� el juego y le respond� tambi�n
en broma que mejor hici�ramos algo m�s interesante. Me mir� con curiosidad y
dijo que que ten�a en mente. Le dije ya m�s seria.

Mira Rodrigo, la verdad es que desde que To�o me cogi� siento
ganas de hacer el amor m�s seguido y si t�, con raz�n unas veces no puedes, que
te parece si yo lo hago por otro lado y luego te cuento que pas�. Me mir�
fijamente un tiempo interminable que me asust� pero con cautela me dijo que si
quer�a hacerlo otra vez con To�o. Respond� con coqueter�a que ya hab�a probado a
To�o y que ten�a la fantas�a de hacerlo con otro hombre que yo conoc�a bien y me
gustaba bastante. Rodrigo dijo, a ver, de una vez dime con quien es que te
quieres acostar.

Ahora fue mi turno de quedarme callada y me dije, ahora o
nunca. "Rodrigo, se que no te va a gustar lo que te voy a decir pero tengo que
hacerlo, si no te gusta lo dejamos ah� y no ha pasado nada, mientras tanto le
sobaba el pene para excitarlo. De golpe se lo dije, me encontr� con Marco y me
pidi� que sali�ramos un d�a de estos pero yo no acept�. Rodrigo se levant� de la
cama y grit�, es decir que quieres que ese hombre te culee, ya me imaginaba que
era �l, porque precisamente acabo de verlo en la calle con la mujer. Le ped�
disculpas y me dijo ya m�s calmado, yo preferir�a que fuera To�o y no Marcos, t�
sabes que nunca he querido que seas ni siquiera amiga de �l. Respond� que no,
que era con Marcos que ten�a curiosidad. Bueno, si acepto me prometes que es
solamente una vez y nunca m�s. Salt� de la cama y me lo com� a besos
content�sima. si mi amor, creo que con una vez basta. Me dijo que cuando lo
pensaba hacer, le respond� que en ese momento estaba con todas las ganas por
culpa de �l y ten�a el celular de Marcos. Me dijo mir�ndome, en verdad que eres
arrecha, bien me dec�a una se�ora que las mujeres cuando pasan de los 40 se
vuelven putas, aunque m�a es la culpa por querer fantasear, pero bueno, si t�
quieres hacerlo, hazlo, ll�malo pero no intentes decirle que yo se nada y otra
cosa, que sea aqu� mismo en la casa, no sea que alguien te vea con �l en la
calle. Cog� el tel�fono y llam� a Marcos y mientras habl�bamos �l me miraba
fijamente sin decir nada.

Cuando me oy� decir, Marcos, si puedes, ven en este momento a
mi casa que quiero hablar urgentemente contigo y mi marido se fue a trabajar y
no sale hasta las 11 de la noche, pero por favor, trata que nadie te vea entrar.
Me respondi� que despu�s llegaba mi marido y lo encontraba, insist� que mi
marido nunca sal�a del trabajo antes de su hora. Me dio un beso por el tel�fono
y se despidi� con un chao amor. En ese momento Rodrigo habl�: y yo que hago, me
quedo aqu� en el cuarto contiguo o me voy. No mi amor, le dije, si voy a hacer
las cosas como a m� me gustan, tiene que ser sin saber que me est�s mirando
porque no puedo desenvolverme como yo quiero y como los chicos vienen en la
noche, no hay problema, te prometo que en dos horas termina todo y nuevamente
gracias por ser tan comprensivo, me contest�, calla loca arrecha.

Baj� de la casa y antes de salir dijo, yo te llamar� en una
hora para saber como est�s y si pasa algo que no te guste pues me lo dices y voy
enseguida. Al o�r tocar la puerta, fui a abrir y entr� Marcos muy nervioso, lo
calm� y pas� a la sala (yo continuaba con la misma ropa, pero antes me hab�a
lavado y perfumado y me hab�a puesto un hilo dental). Marcos se sent� en el
mueble peque�o de la sala, me le acerqu� despacio y me par� frente a �l.
Nuevamente la misma sensaci�n de antes, quer�a que me tomara r�pido y lo hizo,
me cogi� de las caderas que eran sus preferidas y empez� a tocarme las nalgas,
se levant�, me atrajo hacia �l y me dio un beso de esos que una pierde el
aliento, tan rico que es este hombre para besar y mamar. No hablamos casi nada,
aprovechamos bien el tiempo como debe ser.

Le dije, Marcos, te gustar�a que baile para ti (me gusta
bailar y mi marido dice que bailo como si estuviera culeando, le gusta decir la
palabra culear). Puse una m�sica hind� e inici� mi baile, quer�a ver a Marcos
babeando y lo consegu�. Mientras bailaba �l se quiso levantar y yo no lo dej�,
le ped� que se imaginara que estaba en un cabaret y yo era una bailarina de esos
sitios. Nuevamente me par� frente a �l y gir� el cuerpo quedando de espaldas a
Marcos, lentamente mov�a las caderas y mi Marcos no aguant� m�s. Me abraz� por
detr�s , me sac� despacito mi short y se sent� en el mueble, se baj� el pantal�n
y el calzoncillo, me atrajo hacia �l y sin sacarme el hilo dental, me sent� en
su majestuoso y rico miembro, con un dedo me hizo a un lado el hilo dental, yo
con mi mano izquierda le cog� su enorme miembro y me lo puse en mi rajita
depilada. Yo solita me lo clav� hasta el fondo pegando un gemido de
satisfacci�n. Esa penetraci�n fue tan exquisita y como Rodrigo me hab�a dejado
picada, a los cinco minutos se me vino mi primer orgasmo, rico como siempre.

Enseguida Marcos me hizo sentar en el mueble, pero en la
parte donde se ponen los brazos, me abri� las piernas, se las pude alrededor de
su espalda y lo atraje hacia m�, me pegu� a comerme su boca carnosa y sent� que
todo ese pedazo de carne, dura como un tronco, entraba en mi vagina llen�ndola
completamente. Es que el miembro de Marcos era tan gruezo que lo sent�a como
hac�a m�s ancha mi vagina y al meterlo y sacarlo, mi cl�toris rozaba en su pene
lo que me produc�a una sensaci�n de ricura total. Yo le ten�a los brazos en su
cuello y mis piernas en su espalda, es decir que lo ten�a aprisionado. Al sentir
que nuevamente iba a terminar le dije con voz dulce y gimiendo de placer, mi
amor dame m�s, no me dejes nada afuera, m�temelo con fuerza y otras cosas m�s
que hasta me da verg�enza decirlas y as� gimiendo �l empez� a cogerme con m�s
potencia, descargando unos golpes tremendos con su pelvis que chocaba en mi
vagina hasta que me peg� los �ltimos golpes y se vino.

Que rico fue sentir como su semen calientito me entraba y
llenaba mis entra�as, cerr� los ojos y le grit� que me haga acabar. Aqu� se pas�
Marcos, mientras yo m�s gritaba, me sac� el pene e inmediatamente me elev� a�n
m�s las piernas y sin pedir permiso me lo mand� todo por atr�s sin ninguna
delicadeza como la vez anterior. Sent� dolor, pero m�s pudo mis ansias de
sentirme penetrada por ese hombre que le ped�a inconscientemente que me lo meta
m�s. marcos gozaba y completamente sudado por el esfuerzo, me lo sac� y me puso
en una posici�n que me fascina siempre. Se sent� en el mueble y me sent� encima
de su pene mientras me cog�a los senos con tanta fuerza que me dol�an pero me
gustaba. Debo confesar que siento casi el mismo gusto por detr�s que por delante
y con mayor raz�n si el hombre que me penetra me gusta mucho. En el sube y baja,
Marcos me ayudaba de las caderas, en eso suena el tel�fono inal�mbrico, estir�
la mano y dije, al�. Era Rodrigo, me dijo, no hable nada y solamente responde
con si o no.

C�mo est�s en este momento?, bien, ya acabaste?, si, una vez
o dos?, va una, en este momento te tiene clavada?, si, por delante?, no, por
atr�s?, si, ya te cule� por delante, si, te gust�, si, te gusta como te est�
culeando?, si no te imaginas cuanto, te mam� la chepa?, todav�a no, quieres que
te la mame?, si, y t� la verga a �l, tambi�n, tiene la verga grande, si, de 100
a 0 puntos cuanto le pones a marcos en su manera de culearte?, 100 sobre 100.
Rodrigo se qued� callado como sopesando mi respuesta y continu�, eso quiere
decir que te ha gustado mucho esa culeada que te est� dando, verdad?, si
much�simo. Dime, en este momento que te est� dando por el culo, te est�s
moviendo, si, se te nota en la voz so arrecha, cuanto tiempo m�s quieres que te
culee?, unas dos horas m�s por lo menos, caramba que eres insaciable.

Y mientras habl�bamos Marcos me besaba el cuello y teni�ndome
clavada completamente me meti� un dedo rico en la vagina y yo gem�, me dijo
Rodrigo y ese gemido a que se debe, ya te imaginas, te sigue culeando por atr�s,
si hombre, es decir que el gemido fue por que te meti� un dedo en esa rajota, si
hombre, bueno aprovecha todo lo que puedas por que de esta vez no va a haber
otra, y para que Marcos se excitara m�s le dije a mi marido, ven r�pido a la
casa porque me so�� que estaba culeando con un hombre riqu�simo que ten�a una
pieza enorme y estoy mojada completamente. Ok, voy en dos horas.

Una hora m�s dur� mi felicidad, despu�s que Marcos me hizo
terminar, me ba�� junto con �l y con el agua cayendo en nuestros cuerpos
desnudos, me arrodill� y me prend� a mamar ese pedazo de carne que a�n ca�do era
todo un monumento, pero ese monumento se par� nuevamente y le hice a Marcos un
trabajo de campeonato que se acost� en el piso del ba�o y me pidi� que me le
siente en la cara, que felicidad poner mi vagina en esa boca rica, este hombre
rico me devor� mi vagina, me met�a la lengua hasta adentro y con los dientes me
mord�a el cl�toris y me lo succionaba como si fuera su mejor comida. La verdad
es que para mamar y culear, Marcos es 100 sobre 100.

Nos vestimos y en la puerta Marcos me dijo, Albi, no te
imaginas lo que me has hecho gozar, te quiero mi amor y ya sabes que cuando me
llames corro aqu� o donde t� me digas, nos besamos un largo rato hasta que le
ped� que se fuera porque me estaba dando nuevamente ganas que me haga el amor.
Se agacho, me subi� la camiseta y me dio el �ltimo beso en mi vaginita, pero
esta vez por encima del calz�n, como aquella vez en la playa, cuando me dej� dar
el primer beso en mi cosita virgen y fue precisamente este hombre. Repito que lo
de Marcos solo es para satisfacer mis deseos, yo igual vivir� siempre con mi
marido y de vez en cuando tendr� mis escapaditas con Marcos.

Al llegar Rodrigo, dijo, esta noche nos vamos a un motel los
dos solitos, as� que te pones sexi que ahora es mi turno, creo que de aqu� a la
noche ya has de tener otra vez ganas, le dije que con �l tengo siempre ganas.
Despu�s les contar� qu� es lo que pas� en el motel, aunque les anticipo que le
cont� todo a Rodrigo y ese hombre me trabaj� como nunca lo hab�a hecho. En
verdad es que a los hombres les excita que su mujer est� con otro hombre, se
vuelven m�s ricos en todo sentido.

Con amor

Albi