Pasado unos d�as de mi conversaci�n con la Carmen, empez�
vacaciones con lo cual mi peque�a historia con la carnecer�a pensaba que ah�
terminar�a.
A mediados del mes de Agosto recib� una llamada del trabajo
que con mucha urgencia me ten�a que presentar por unos problemas que hab�an
surgido con un proveedor y yo era el encargado de solucionar cualquier problema
con ese proveedor. As� que volv� a la ciudad pensando que en 2 d�as tendr�a el
problema resuelto.
Llegue por la tarde y cuando aparque el coche vi que la
carnicer�a estaba abierta, mire en su interior y vi que estaba Carmen
completamente sola.
"Hola, �No ha hecho vacaciones?"
"No, hemos tenido un problema y no nos hemos ido, y para
estar en casa aburrida prefiero abrir, que as� me distraigo"
"�Tan grave es problema, si la puedo ayudar en algo?"
"Gracias. Pero es que han ingresado a mi suegra y mi marido
se pasa el d�a en el hospital, no es nada grave, pero ya nos a fastidiado las
vacaciones". "No se puede llegar a vieja, cr�eme"
"No lo dir� por usted, que cada d�a la encuentro mas joven"
"Ay si yo te contara", �Y tu ya has acabado las vacaciones?"
"No, he tenido que volver unos d�as por trabajo".
"Y usted, �C�mo se encuentra de esos calores que tenia?"
"Hasta hoy mejor pero me parece que hoy va a volver a apretar
el calor".
Ya os pod�is imaginar como tenia el cuerpo y la polla con
esta indirecta, Carmen esperaba otro show, estaba claro, �Pero que pod�a
ocurrir?, no pod�a permitir que esto se supiese por el vecindario.
Al d�a siguiente por la ma�ana fui a trabajar y al regresar
al mediod�a vi que la tienda estaba cerrada, sub� a casa y me desnude para darme
una ducha, al pasar por la ventana del comedor vi que Carmen estaba recogiendo
la ropa tendida y la salude, no me pod�a ver completamente por que la ventana me
llega por encima de mi cintura, ella correspondi� a mi saludo con una sonrisa.
Despu�s de ducharme me prepare un poco de comida y me puse a comer en la mesa
mientras le�a el peri�dico. O� un ruido y levante la mirada y no vi nada pero
antes de volver al peri�dico mis ojos se dirigieron al balc�n de Carmen, estaba
comiendo sola sentada de tal forma que pod�a ver al completo sus piernas,
llevaba puesto un ba�ador completo con tirantes que dejaban al aire sus hombros,
su espalda y le formaba un canalillo entre sus tetas que ya le gustar�a a mas de
una ventea�era.
Ella vio como la miraba y se abri� de piernas, yo que tan
solo llevaba la toalla del ba�o en la cintura como si fuese un pareo note como
mi polla empezaba a desarrollarse y se abr�a paso por la toalla. Carmen empez� a
abrir y cerrar las piernas hasta que el ba�ador dej� al descubierto medio co�o,
deslice mi mano por debajo de la mesa hasta encontrar mi polla y empec� a
masturbarme. La vecina vio el movimiento de mi brazo y enseguida supo lo que
estaba pasando debajo de la mesa. Su mano tambi�n se desliz� a su entrepierna y
levantando un poco la entrepierna del ba�ador se introdujo un dedo en su rosado
co�o, ella no apartaba su mirada de m� mientras con la otra mano se introduc�a
piezas de fruta en la boca sensualmente. Mis huevos estaban al l�mite y sin
mirar que nadie mas que ella me pudiera ver me levante y descargue toda mi leche
encima el plato. Observe que Carmen a�n no se hab�a corrido y pens� en hacer
algo para que ella tambi�n gozara lo mismo que yo. Fui a la nevera y cog� unos
fresones que guardaba para la noche y empec� a mojarlos en mi leche y ha
com�rmelos sensualmente, sus dedos entraban y sal�an de su co�o ha una velocidad
incre�ble cuando de pronto se detuvieron y su cuerpo cay� encima de la mesa. Nos
quedamos los dos mir�ndonos como agradeci�ndonos el mutuo placer.
El Domingo me despert� casi a las 4 de la tarde despu�s de
haber trasnochado el s�bado. Las ojeras me llegaban al suelo y la resaca hac�a
de las suyas en mi cuerpo, la verdad es que no estaba para nada ni nadie. Me
acerque a la ventana para ver que d�a hac�a, el sol era radiante y en el balc�n
de Carmen estaban ella, su marido, su hijo y su nuera comiendo. As� que me fui a
duchar y despu�s me sent� en una tumbona hasta que se me pasara la resaca. De
vez en cuando echaba un vistazo a mis vecinos y en uno de estos vi como se
desped�an el hijo y el marido de Carmen, supuse que se iban a ver a la suegra de
Carmen, pero la nuera se quedaba con ella. Despu�s de acabarse el caf�
recogieron la mesa y la apartaron del balc�n y las dos se sentaron en unas
sillas de esas de playa a tomar el sol. Carmen llevaba el mismo ba�ador que el
d�a anterior y su nuera un bikini de color fucsia.
Las ve�a hablar pero Carmen me miraba de vez en cuando, y
cuando lo hac�a yo me apartaba un poco la toalla para que viera que no llevaba
nada debajo, ella por su parte se quito los tirantes y se bajo el ba�ador
dejando parte de sus pechos al descubierto pero sin que se le viera nada.
Entonces me levante y como el que no quiere la cosa hice que la toalla se me
cayera dejando todos mis atributos al aire, recog� la toalla y fui a la nevera a
buscar en bote de nata. Regrese a mi tumbona y deje el bote de manera que Carmen
pudiera verlo. Cuando fijo su mirada en �l lo cog� y levantando la toalla sin
que ella pudiera ver nada llene mi polla de nata, estaba fr�a y mi instrumento
se levanto haciendo una tienda de campa�a con la toalla, cuando volvi� a mirar
aparte la toalla para que viera donde estaba la nata y recogiendo un poco con un
dedo me lo lleve a la boca.
Creo que mi vecina ya estaba bastante caliente por la
situaci�n, se levanto y se fue, a los pocos minutos regreso y qued�ndose de pie
delante de su nuera vi como empezaba a gesticular con los brazos hasta que se le
cayo el ba�ador dejando ahora si, ver sus hermos�simas tetas con sus rosadas
aureolas y sus hinchados pezones. Su nuera puso ni se inmut� y Carmen no hizo ni
el menor gesto para subirse el ba�ador, y se sent� en la silla como si no se
diera cuenta de que sus tetas estaban tambi�n tomando el sol. Al rato Carmen se
gir� hacia su nuera y mientras hablaba con ella le desabrocho el bikini para
luego quit�rselo mientras con su mano le sobaba sus peque�as y puntiagudas
tetas.
Eso me puso a�n m�s caliente la nata se deshac�a por las
altas temperaturas que desprend�an mi polla y mis huevos as� que cuando Carmen
volvi� a mirar me quite la toalla y volv� a ponerme un buen chorro de nata.
Carmen se incorpor� y cogiendo a su nuera de la mano le indic� donde tenia que
mirar yo me cubr� r�pidamente y al ver que me tapaba Carmen cogi� una teta de su
nuera y la beso en los labios. Estaba claro, Carmen quer�a que me masturbara
para las dos.
Su nuera respondi� al beso llevando una mano a las tetas de
Carmen y mientras se la sobaba, con dos dedos le pellizcaba los pezones. Ambas
mujeres se abrieron de piernas y apartando los ba�adores dejaron sus doradas
almejas libres para ser vistas. Mi mano sub�a y bajaba por mi polla suavemente,
mientras mi otra mano recorr�a mi cuerpo y pellizcando mis pezones, mis piernas
totalmente abiertas dejaban ver mis hinchados huevos. Carmen abri� su co�o de
par en par con sus dedos y su nuera se introdujo en su co�o un par de dedos. Yo
no pod�a mas mi mano iba cogiendo cada vez mas velocidad hasta que me corr�
tirando toda la leche con tanta fuerza que hasta me cayo en la cara, qued�
exhausto viendo como las dos damas ten�an un orgasmo viendo como yo me hab�a
corrido.
A los pocos d�as entr� a comprar, Carmen estaba acabando de
servir a una clienta y no dec�a nada estaba absorta en su trabajo.
"�Ya se encuentra mejor, Sra. Carmen?"
"No, hijo, no. Cada vez es peor, me entran unos calores que
no s� que hacer".
En ese momento la clienta se fue y nos quedamos solos.
"Tendremos que ponerle soluci�n a este problema, Sra.
Carmen".
"Ya lo s�, hijo. Pero me preocupa m�s el remedio que la
enfermedad, en este caso".
"�Por que?.
"�Y si me gusta?, �Qu� pasar�?".
"Gustarle, seguro que le gusta. Y no s� lo que puede pasar,
ya veremos, todo tiene soluci�n".
Pagu� y al darle el dinero rozamos nuestras manos yo la
miraba al os ojos y vi como los cerraba con el contacto de nuestras manos.
A finales de Septiembre son las fiestas de mi barrio y ah�
ten�a una ocasi�n inmejorable para que nuestros cuerpos se pudieran arrimar en
alg�n baile. Pero esto ya os lo contar� en otro momento.