Hola, me llamo Alicia y les contare una historia que ocurri�
cuando tenia 18 a�os.
Yo era una chica que estaba cursando segundo de bachiller en
un instituto, en el instituto nos hac�an llevar todav�a uniforme. Desde que
ten�a unos 14 a�os me fui desarrollando para convertirme en una bella
muchachita, morena, ojos marrones, pelo liso y largo, un culo espectacular y
unos pechos bien desarrollados. Me gustaba jugar con los chicos, ponerles
calientes y dejarles con las ganas, se que no estaba bien pero me daba morbo.
Un d�a en clase, llegue demasiado lejos, quise poner cachondo
a mi profesor de matem�ticas que se llamaba Carlos, estaba sentada en primera
fila y not� que estaba mirando mis piernas constantemente, decid� actuar, empec�
poco a poco a abrir mis piernas y a dejar ver entre ellas mis braguitas, yo le
notaba como miraba y eso me pon�a mas cachonda, llegue incluso a separarme la
braguita hacia un lado para que me pudiera ver mi co�ito.
A los poco d�as el me llam� a su despacho para comentarme
algo sobre un examen.
-�Qu� pasa?- le dije
-Entra, si�ntate- me dijo
Yo acced� a entrar pero no me fiaba mucho de las intenciones
de el.
Mis sospechas pasaron a ser ciertas, se levanto y me dijo:
-Sabes, estoy hasta las narices que act�es como una puta en
medio de clase, �te crees que no me hab�a dado cuenta?, llevas poni�ndome
cachondo unos d�as, ahora te vas a enterar puta de mierda.
No me cre�a lo que estaba pasando, me quer�a follar mi
profesor.
-Nooo, Carlos, no por favor yo�- le dije
- C�llate la boca y no digas nada- diciendo eso se levanto y
empez� a besarme y a tocarme por todo el cuerpo, sus manos tocaban mi pecho por
encima de el polo, me levant� la camiseta y me quede en sujetador, saco mis
pechos por encima y empez� a chuparlos y a darles mordisquitos.
De pronto son� la puerta del despacho, era mi profesora de
gimnasia, pens� que era mi salvaci�n.
-�Qu� est� pasando aqu�?- pregunt�
- Nada que me voy a tirar a esta puta que siempre esta
poniendo cachondo a todo el mundo- dijo Carlos
La profesora de gimnasia que tenia tambi�n un cuerpazo dijo:
-�A si que has sido mala?, pues vamos a castigarte- dijo
mientras re�a
Carlos sac� su enorme polla que esta ya dura y me dijo que se
la chupara, ante mi negativa, Sonia, la profesora de gimnasia saco una enorme
regla de madera y me dijo;
-�Te vas a enterar! Diciendo eso Carlos me coloc� de espaldas
a ella contra la mesa, me subi� la falda y me bajo las bragas.
Comenz� a golpearme, a golpearme con dureza con la regala en
mis nalgas, me dol�a much�simo. Carlos se puso coloc� delante de mi he introdujo
su polla en mi boca, yo acced� a mamarsela sino recibir�a el castigo de Sonia
con la regla.
-A si es puta de mierda as� se mama una polla, vas a aprender
a no ser una calientapollas- dijo Carlos.
Sandra empez� a tocarme por detr�s, me quito la falda y las
bragas y empez� a introducir uno de sus dedos en mi ano mientras me chupaba en
cl�toris, la gran mamada que le estaba haciendo a Carlos dio sus frutos, se
corri� en mi cara, Carla entonces se coloc� por encima de mi se quito los
pantalones y me izo chuparle el co�o, la imagen de ver a dos mujeres le dio
morbo a Carlos que no tardo en volver a tener otra erecci�n.
-Ahora vas a ver como se folla de verdad- diciendo eso
introdujo su polla por mi co�ito, me follaba salvajemente, con agresividad, me
daba cachetes de vez en cuando, Sonia alcanz� el orgasmo se visti� y se fue de
ah�.
-Tengo clase, me tengo que ir- diciendo eso si visti� y se
fue.
-Ahora por detr�s, seguro que por ah� no te han dado nunca
zorra de mierda- dijo
Coloc� su enorme pene en la entrada de mi ano y empez� a
empujar, le costaba entrar pero poco a poco iba entrando cada vez mas .Yo entre
gemidos y sollozos le dije:
-Venga maric�n de mierda follame m�s r�pido.
-Eso estoy haciendo puta, no te vas a sentar en un mes- al
poco de decir esto se corri� en mi culo, me quede tendida en el suelo y de mi
ano sal�an restos de semen y gotitas de sangre.
A partir de ese d�a no les pude volver a mirar a la cara y
tuve que cambiarme de colegio, eso si, en aquella evaluaci�n saque dos
sobresalientes.