Otra de nuestras fant�sticas aventuras tuvo lugar en el
campo, una amiga de la universidad nos invit� a pasar un fin de semana a su
cortijo campestre, mi mujer no pudo ir por cuestiones laborales, pero no tuvo
inconveniente en que fuera yo.

Una vez all� me salud� con un beso apasionado introduciendo
la lengua en mi boca, muy amablemente me ense�� todo el cortijo, incluido el
pajar y all� empez� el fin de semana, se tir� sobre un mont�n de paja, separ�
las piernas y no llevaba bragas, pero vi un co�o negro pidiendo guerra, ella
empez� a pasarse los dedos por la raja al mismo tiempo que dec�a: "m�rame, �has
visto algo as� en t� vida?" y desde luego, nunca hab�a visto nada igual, unas
piernas perfectas terminadas en un tri�ngulo m�gico, mi polla estaba ya
preparada cuando ella la sac� del pantal�n y estuvo contempl�ndola mientras yo
bajaba una mano al co�o y otra buscaba las tetas, nos desnudamos, la sent� sobre
una alpaca de heno, hice que se abriera las piernas y empec� a chuparle el co�o,
se nota que le gustaba porque ella misma me habr�a paso a su interior y se
frotaba el cl�toris para llegar al cl�max, mis manos aprisionaban las tetas
voluminosas y notaba como los pezones se endurec�an al roce con mis manos, no
tard� mucho en descargar sobre mi boca, poco despu�s era ella la que me chupaba
el aparato, pero con tal maestr�a que no tarde mucho en llenarle la boca de
leche blanca y espesa.

Despu�s de este aperitivo, nos vestimos y al salir me fij� en
una sirvienta que intent� esconderse al ver que sal�amos, lo m�s seguro es que
nos hubiese visto ya que ten�a los dedos mojados de haberse estado haciendo una
paja a costa nuestra, la due�a la llam� y me present� a Pilar que as� se
llamaba, para que no se cortara yo muy cort�smente le tom� la mano y con la
lengua se la limpi� del resto de la corrida, ya en el cortijo me ense�� las
habitaciones, cuando llegamos a la cocina estaba la cocinera embadurnada de
aceite y meti�ndose un pl�tano por el co�o, al vernos se puso muy r�pidamente el
delantal por lo que tap� todo menos su culo, la due�a llam� a la sirvienta y a
la cocinera en el comedor y una vez all� me dijo que ellas tres eran ninf�manas,
yo por mi parte les dije la verdad que era ninf�mano, y por supuesto las tres se
echaron a re�r, entonces ni corto ni perezoso me desnud� delante de ellas y
dije: "�Qui�n es la primera que va a probar?, como la que estaba m�s cerca de mi
era la cocinera y no le hab�a dado tiempo a cambiarse, le quit� el delantal y la
puse a cuatro patas, en esta postura se la met� por el co�o y al comprobar que
no me costaba trabajo debido al aceite, se la saqu� y se la met� por el culo sin
miramientos, se ve que eso le iba cantidad, ya que empez� a culear al mismo
tiempo que la sirvienta me pon�a el co�o delante de la boca y me dec�a:
"ch�pamelo igual como se lo chupaste a la se�ora", la se�ora se arrodill�
delante de la cocinera para que le chupase el chumino o el ojete del culo, en
esta especie de ovillo humano estuvimos hasta que nos corrimos.

Como vi a la cocinera que segu�a llena de aceite, propuse
pegarle un ba�o, todas consintieron, pero el ba�o no los pegamos todos en la
piscina, una vez secos y en el dormitorio seguimos con la org�a, esta vez la
cocinera cogi� una polla de pl�stico y se la at� a la cintura, yo cog� de
compa�era de folleteo a la due�a y la cocinera a la sirvienta, nosotros
empezamos con un 69 y la cocinera empez� d�ndole gusto al conejo de la
compa�era, al ver a las dos t�as follando me calent� de tal forma que me corr�
enseguida en la boca de la due�a que la apart� y parte de mi corrida fue a parar
al cuerpo de la sirvienta, mi boca se inund� de flujo y las otras dos se
corrieron casi al instante y yo les limpie el co�o del orgasmo a las dos, ese
d�a termin� as� pero me prometieron una sorpresa al d�a siguiente.

Por la noche cerr� la puerta con llave ya que no me fiaba de
ninguna de las tres mujeres, al d�a siguiente lo primero que me preguntaron fue
que porqu� hab�a cerrado la puerta, yo les respond� que por mi salud, y todos
nos echamos a re�r.

Despu�s de desayunar nos montamos en un patrol y nos
dirigimos a otra parte de la finca bastante alejada del cortijo, la casita no
era muy grande, el sal�n dispon�a de una gran cama un televisor y un v�deo y una
colecci�n de pel�culas y revista porno, me desnudaron y se desnudaron, pusieron
una pel�cula porno y se echaron sobre la cama dej�ndome un sitio entre medias de
ellas me dijeron que esa casa era el pajar, o sea la casa donde se hacen las
pajas, dispon�an de toda clase de aparatos vibratorios, yo me qued� al lado del
televisor viendo como se manoseaban el cuerpo d�ndose el mayor gusto que pod�an
frot�ndose los cl�toris y pellizc�ndose los pezones, yo empec� a frotarme la
polla ante aquella vista lujuriosa, al mismo tiempo que ellas miraban el
televisor y a mi, me acost� en la cama al lado de ellas y me puse a ver la peli,
era una de esas que llaman porno-guarro, una t�a se orinaba en el cuerpo de la
otra, entonces la otra se levant� y adem�s de orinarse se cag� encima de la
otra, cogi� su propia mierda con ambas manos y empez� a llenarle el cuerpo a la
otra hasta que lleg� al co�o y le fue introduciendo la mierda en forma de polla,
al mismo tiempo que con la otra mano le llenaba toda las tetas de mierda, la
otra por su parte le met�a los dedos en el co�o y en el culo.

Una se corri� en los dedos de la que le hac�a la paja
mientras la otra se corri� sobre la mierda que le entraba y le sal�a del co�o,
despu�s se metieron las dos en el cuarto de ba�o y una limpiaba a la otra con
una esponja en cada mano, al llegar al co�o soltaban las esponjas cog�an unos
consoladores y se los met�an una a otra en el co�o bombeando con fuerza hasta
que se corr�an, entonces me dirig� hacia ellas y les dije os gustar�a que os
hicieran eso, ellas respondieron que les parec�a una mijilla guarro, pero que no
les importar�a probar con algo parecido como barro o algo as�, quitaron esa
pel�cula y pusieron otra, pero esta vez los protagonistas que me llamaron la
atenci�n fueron los animales, lo primero que apareci� fue una yegua atada y dos
t�as desnudas acercando un caballo hasta el co�o de la yegua y lo ataron
tambi�n, una t�a se puso sobre una silla y le meti� el pu�o a la yegua hasta m�s
all� del codo, el caballo al oler a la yegua se puso cachondo y la otra t�a se
puso debajo del caballo y le empez� a acariciar la polla hasta que se enderez�
del todo, la t�a empez� a chup�rselo como si fuera la de un t�o, al mismo tiempo
que se acariciaba el co�o, al cabo de un rato se dio media vuelta y se introdujo
parte de la polla en el co�o.

Era incre�ble que le cupiera tanto, ella empez� a culear, el
caballo dio una embestida y descargo, ella se la saco y la corrida le llen� toda
la espalda y el culo, la otra segu�a metiendo las dos manos en el co�o y en el
culo de la yegua, ella tambi�n quer�a disfrutar con la polla del caballo, as�
que cambiaron de animales, esta cogi� la polla del caballo y se la mamo, al
tiempo que la otra le met�a la mano en el co�o a la yegua y se la pasaba por el
hocico al caballo, con lo que el caballo se arm� de nuevo y esta cambio de la
boca al co�o y empez� a bombear corri�ndose antes que el caballo, por lo que se
dio la vuelta y se la mene� hasta que el caballo se corri� de nuevo sobre las
tetas, la cara y las piernas de ella, por fin soltaron los caballos y ellas dos
se empezaron a chupar los restos de corrida del caballo, en ese momento se
corrieron las tres casi al mismo tiempo, al sentir como se corr�an acentu� mis
frotaciones y tambi�n me corr�, entonces ella me dijeron nosotras hacemos lo
mismo, pero con vacas y toros, yo no me lo cre�a, as� que me llevaron a la parte
de atr�s de la casa y vi un toro y una vaca atados igual que los caballos que vi
antes y empezaron a hacer las mismas escenas, solo que la cocinera en este caso
cogi� las mierdas de ambos animales y se los refreg� por todo el cuerpo al mismo
tiempo que la due�a era follada por el pito del toro y la sirvienta le met�a la
mano por el culo a la vaca con lo que me dejaba el co�o libre por lo que cog�
una silla alta que estaba al lado y le met� la polla a la vaca por el co�o hasta
que me corr�, despu�s baj� y le com� el conejo a la sirvienta mientras la due�a
ten�a un orgasmo al sentir la leche del toro llenarle toda, la cocinera hab�a
desaparecido, por lo que las otras dos me llevaron al �ltimo cuarto que quedaba
por ver, yo cre� que era el ba�o, pero hab�a algo m�s, una piscina llena de
barro, al fondo estaba la cocinera duch�ndose, por lo que corrimos a ducharnos
nosotros tambi�n, al terminar de ducharnos, ellas se metieron en el barro y me
dijeron:

"esta es la sorpresa, llena nuestros cuerpos de barro", yo me
dirig� hacia ellas y al meterme en el barro sent� algo extra�o y mi polla se
empin� corriendo, empec� d�ndole barro a todas empezando por las piernas,
siguiendo por los muslos hasta llegar al culo y el co�o, que antes de darles
barro los chupe un poco meti�ndoles la lengua, ellas siguieron mi juego y
empezaron a manosearse las tetas y el co�o unas a otras, yo segu� llenando de
barro los co�os, las caderas y los pechos y por �ltimo las tetas de las tres,
entonces ellas me rodearon y empezaron a echarme barro, pero en grandes
cantidades que luego repart�an por mi cuerpo, pero las tres se llenaron ambas
manos de barro y me lo echaron en la polla por lo que casi no se ve�a, una de
ellas se tumb� y la cocinera empez� a embarrarla mientras la sirvienta se
refregaba conmigo para quitarme el barro, yo la tumb� tambi�n en el barro, le
llen� las tetas de barro y met� mi polla entre las tetas, ella aprision� mi
polla con sus pechos y empec� a hacerme una cubana, no tard� mucho en tener a
las otras dos tumbadas a mi lado, por lo que introduje un par de dedos en cada
co�o al mismo tiempo que la sirvienta se mov�a para que le introdujera mi polla
en su co�o, se la met� y empec� un mete-saca muy lento, para que sintiera toda
mi picha como le iba entrando y saliendo, no tard� mucho en llegar al orgasmo,
por lo que esta vez la cocinera se puso a cuatro patas y as� la cabalgu� durante
un rato, la cambie de postura d�ndole la vuelta y volv� a follarla por el co�o,
pero esta vez embistiendo fuerte, se corri� mordi�ndose los labios y apretando
las piernas contra mi polla, aguante mi corrida e intentaba hacer correr a las
tres antes de correrme yo, la due�a me tumb� con la polla mirando al techo y se
la meti� dej�ndose caer, mientras sub�a y bajaba me llenaba de barro por todas
partes, de pronto se dio la vuelta d�ndome la espalda, por lo que aprovech� para
darle la lengua a la cocinera que estaba sobre la sirvienta haciendo un 69 pero
meti�ndose los dedos en el co�o y el culo en vez de chuparlos, la due�a aceler�
en sus subidas y bajadas hasta que me llen� las ingles con su corrida, ellas se
dieron cuenta que no me hab�a corrido, me levantaron entre las tres y empezaron
a hacerme un pajote entre las tres, mientras una me la meneaba, otra me sobaba
las pelotas y la otra me introduc�a la lengua hasta la garganta, ante ese
trabajo no me pude resistir y le llene las manos y los pechos de la que me la
estaba pelando y le llene toda la cara de leche a la que me masaje� los
colgajos, pero la que me daba la lengua se corri� en mi mano ya que yo le hab�a
introducido dos dedos en el co�o y otro en el culo.

Despu�s del barro nos duchamos frot�ndonos unos a otros, una
vez los cuerpos limpios y todav�a bajo la ducha, las puse delante m�a y chup�
los co�os a las tres hasta que se corrieron en mi boca, despu�s me cogieron las
tres y empezaron a chuparme la polla entre las tres y me corr� sobre sus caras,
una vez secos nos fuimos al cortijo y las tres se despidieron de mi: "hasta
pronto ninf�mano".