Era un chico normal, con una vida normal, y unas apetencias
normales. Se hab�a casado hacia tres a�os, y su vida sexual era rica y
placentera pero���..
El Diablo, (por algo es diablo) conoce nuestros mas �ntimos
secretos, nuestras fantas�as, sabia de la suya y la puso a su alcance.
Su esposa ten�a una prima, explosiva, con un culo de locura
y unas tetas, donde cualquier hombre so�ar�a masturbarse.
Muchas veces, a solas en su habitaci�n, dejaba volar su
imaginaci�n y se pajeaba en ese culo que lo volv�a loco.
Ella lo sab�a, (las mujeres tenemos un sexto sentido para
esto, sabemos cuando nos desean, y eso nos hace mas fuertes, poderosas, una
mujer deseada, se puede comer el mundo)
Cuando se encontraban en alguna reuni�n familiar, ella se
mostraba provocativa, usando todo su encanto, no perd�a ocasi�n de ense�arle
sus tetas, ni de rozar su paquete con el culo.
Un d�a, su esposa al marcharse le dijo que pasar�a su prima a
recoger un vestido y un bolso, ella no podr�a estar debido a su trabajo, y no
volver�a hasta la noche, pero que ella misma eligiera lo que necesitaba...
Se puso nervioso, era la primera vez que estar�an a solas en
la casa, la deseaba, Ufffffff como la deseaba, estuvo toda la ma�ana pendiente
de su llegada. Sobre las doce son� el timbre, ansioso abri� la puerta, y all�
estaba el motivo de tantas noches de insomnio alimentadas de sus locas
fantas�as. Bes� su mejilla y un fresco olor a jab�n impregn� sus fosas nasales,
cerr� los ojos y lo disfrut�, sent�a un calorcito dentro del pecho y parec�a que
el coraz�n se le ensanchaba.
--- �Dej� Carmen algo para m�?�pregunt� con una vocecita
inocente
---Dijo que tu misma eligieras-----respond�
----Podr�as ayudarme----
----Yo de eso no entiendo sube y el�gelo tu---
La vio subir las escaleras, llevaba una faldita corta, muy
corta, y desde abajo, pudo ver que no llevaba bragas. Su pene como si de una
br�jula se tratase se�al� la escalera, tan tieso, que le hacia da�o.
Corri� a la cocina, se mojo la nuca y bebi� un gran vaso
de agua, las manos le temblaban, estaba tan nervioso que le ca�a por la
comisura de los labios. La oy� que le llamaba.
--No lo encuentro, sube a ayudarme---
El no quer�a, su polla amenazaba con romper los pantalones, y
no sab�a hasta que punto podr�a controlarse.
�� Sube �! � O es que me tienes miedo �
Arm�ndose de valor, empez� a subir las escaleras, al mover
las piernas, la tela del pantal�n rozaba su pene, y la excitaci�n iba en
aumento.
Al entrar en la habitaci�n, la vio delante del armario, los
brazos levantados, intentando bajar una gran caja de la parte de arriba, en esa
postura sus nalgas quedaban totalmente al descubierto, se qued� petrificado al
ver esas cachas que le enloquec�an.
---��Ven ay�dame!!
Se puso tras ella para ayudarla a sostener la caja, su
paquete quedaba totalmente a la altura de sus nalgas, notaba el calor que
desprend�a ten�a miedo de tocarla, pero ella se mov�a lentamente apretando su
culo contra el.
Estaba tan nervioso��.. Era su sue�o mas ansiado, pero
jam�s pens� llegar a realizarlo. Baj� una mano y empez� a acariciar ese culo
que lo enloquec�a. Ella gem�a y se retorc�a y cada vez se apretaba mas contra
el. Explor� un poco mas y meti� sus dedos en la rajita, primero uno, estaba muy
mojada y su dedo se deslizaba f�cilmente, animado viendo su cooperaci�n, meti�
dos dedos y los mov�a r�tmicamente. Ella empez� a temblar, era muy receptiva y
su cuerpo se agitaba de deseo.
Necesitaba ambas manos, le ten�a unas ganas de muerte, dej�
la caja que a�n sosten�a con una mano y la gir� hacia el. Ella al mirar ese
gran paquete que hasta ahora solo hab�a sentido en sus nalgas , se alborot�
totalmente, desabrocho su cintur�n y baj� su cremallera, sac� su gran pene y
lo tom� en sus manos con una mirada de admiraci�n. Se arrodillo ante el , lo
puso en su boca, el temblaba��. �ni en sus mejores sue�os pod�a imaginarlo as�,
ella succionaba, chupaba, lam�a����. Los test�culos le dol�an de tanta
excitaci�n, apretaba la pelvis contra su boca y gozaba�.. ��� Como gozaba!!!
Se ven�a, y no quer�a que fuese as�, nooooo, no tan r�pido, quer�a disfrutar al
m�ximo, y hacerla disfrutar.
Sac� el pene de su boca, y tom�ndola en brazos la dej� sobre
la cama, abri� sus piernas y admir� su sexo depilado, h�medo, Ummmmmmmm ���
tanto tiempo esperando este momento!!!
Pas� la lengua lentamente, deleit�ndose con sus jugos, as�
lo imaginaba, con un agradable sabor a berberechos frescos, que el saboreaba tan
ricamente. Su lengua se mov�a r�tmicamente haciendo titilar el cl�toris, ella
gem�a, gritaba, agarraba su pelo y lo apretaba contra su sexo, pidiendo,
m�s���m�s��
Not� un estremecimiento y su boca se inund� del preciado
liquido, sent�a los espasmos en su lengua, sigui� movi�ndola despacio, como en
una caricia, hasta que not� que se relajaba..
Su pene estaba duro, su glande amenazaba reventar de tan
hinchado y brillante. Lo introdujo en la h�meda cuevita y sinti� como lo
absorb�a y presionaba , sus paredes se contra�an lo agarraban como en un
abrazo. Comenz� los movimientos de vaiv�n, primero suaves, pero aumentando el
ritmo cuando sent�a sus contracciones, aceleraba, paraba. Deseaba que todo fuera
perfecto, y correrse los dos a la vez..
Cuando not� que se arqueaba, que todo su cuerpo se agitaba en
un espasmo impresionante, y sus paredes vaginales oprim�an fuertemente su pene.
Aceler� el ritmo y vaci� todos sus fluidos en su interior.
Ambos estaban agotados, se dejaron caer uno al lado del
otro y satisfechos se durmieron.
Se o�a un timbre a lo lejos, sonaba estrepitosamente, abri�
los ojos asustado, estaba acostado en el sof� y no recordaba como hab�a llegado
all�, se levant� r�pidamente, y mirando asombrado a su alrededor, fue a abrir la
puerta.
--���- Buenos d�as, �!! Vengo a buscar el vestido y el
bolso.
Se qued� alucinado, y vio como la prima de su mujer, con su
faldita corta corr�a escaleras arriba, la sombra oscura entre sus piernas, no
dejaba mucho a la imaginaci�n�������. No llevaba bragas!!!���
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___Va por ti amigo, esta era tu fantas�a, espero que
ley�ndola consigas lo que me prometiste, y adem�s����.seas bueno, en los sue�os
puedes vivir cualquier fantas�a, sin poner en peligro tu matrimonio.