Pese a todo lo bueno que esperaba entre en un p�simo per�odo
de mi vida. Se acercaba noviembre e iba a cumplir mis 30 a�os, Jorge no ten�a
nunca tiempo en el trabajo, y en alguna charla caliente que intente con �l
franeleando en su oficina, se ofendi� con la idea de incorporar alg�n amigo.

Mi relaci�n con el se fue enfriando, cambie mi vestimenta y
ya no me vestia provocativamente. Mi marido ten�a cara de preocupado todo el
tiempo y trataba de saber que me pasaba.

Como las vacaciones estaban cerca me propuso que eligiera: si
prefer�a Brasil, Uruguay, o Gesell. En realidad le dije que me gustaria volver a
una casita que ten�an mis abuelos en Mar de Ajo. Se quedo mirandome, pero
arreglo todo y pudimos al fin ir.

Las vacaciones fueron de lo m�s normales y aburridas, pero en
la casa vecina que era de los descendientes de mi t�a abuela, estaba una prima
de mi padre, Norma, de unos 55 a�os, de muy buen ver. Encontre en ella alguien
con quien hablar y que me ayudo a ordenarme, el d�a antes de que terminaran las
vacaciones me dijo: Por lo que me contaste se ve que tu marido te ama, y aunque
sufra, le encanta que lo humilles y lo sometas, se siente vivo, y por lo que se
ve a vos tambien porque no te excita tener relaciones si no est� el presente.

Luego hablando de mi carrera, y por lo que le hab�a contado,
me sugiri� porque no empezaba de nuevo la carrera de medicina, y agrego en tono
jugeton adem�s vas a estar rodeada de muchachitos, muy calientes, muy jocosos y
muy manejables; no son hombres como te gustan pero dan mucha leche y se manejan
facil.

Al d�a siguiente volvimos a la ciudad, otra vez mi cabeza
estaba clara y me sent�a plena, las fichas cayeron, pense. Pasaron cuatro meses
de oscuridad, otra vez a la ruta.

LLegamos a la noche a casa me ba�e y me vesti muy sensual, al
ir a la cocina mi marido que estaba en slip cocinado, se dio vuelta, y al verme
se le ilumino el rostro. Me acerque a �l lo hice girar y lo apoye en la mesa, me
arrodill� y empece a acariciar su pija sobre el slip, su cabeza sobresalia y
empece a jugar con la leng�ita en la parte de atras de su cabecita.

Que mala que soy mi amor, Norma me sugirio que vuelva a
estudiar y ya estoy pensando en todas las pijas llenas de leche que me esperan;
en cuantos polvos se pueden echar en una noche;

Le baje el slip en la parte delantera, su pija quedo
sacudiendose en el aire, ademas me da bronca, porque me puse el DIU, y a todos
esos guachos los voy a dejar que me llenen de leche y vos me vas a seguir
cogiendo con forro; Su pija saltaba cada vez m�s loca, me la trague hasta el
fondo la mame un buen rato y volv� al ataque. Encima me muero por saborear la
lechita de esas pijas y a vos no te dejo... ves que soy muy mala... Me la met�
de nuevo en la boca, cuando sent� que estaba por acabar, la saque y la apoye
sobre su pelvis haciendo que se acabara en el mismo. Mi marido grito y gimi� y
su cuerpo se sacudi�, me miro a los ojos y me dijo cuanto hac�a que no me hac�as
disfrutar as�, pens� que no me amabas m�s.

Esa noche nos dormimos abrazados....continuar�

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