Descubrir la sexualidad de mi hija adolescente fue toda una
aventura para m�.

Me llam� Carlos y tengo 40 a�os. Soy empresario de Barcelona,
Espa�a, y llevo casado 17 a�os con Marta, una mujer de 38, m�dica. Ambos tenemos
buen aspecto, pues hacemos gimnasia y cuidamos nuestra dieta. Tenemos una hija,
Sara, que acaba de cumplir 15 a�os, y es la verdadera protagonista de esta
historia. Se trata de una chica alta y flaca, con los pechos muy crecidos,
erguidos, morena, con el cabello largo y rizado. Hace unos meses se puso un
pendiente en el ombligo y suele llevar ropa muy ajustada, dejando gran parte de
su piel al descubierto. Desde hace alg�n tiempo, su madre y yo creemos que est�
vi�ndose con alguien, pues hemos encontrado, sin querer, unos condones en su
cuarto.

Algunas veces, en los �ltimos meses, me he sorprendido
mir�ndola, casi embobado, sobre todo ahora que estamos en verano, y en Barcelona
suele hacer mucho calor. Mi historia, o nuestra historia, empieza hace unas 5
semanas, una ma�ana que sub� a la azotea del edificio que vivimos, en el barrio
de Sants. Junto a la puerta de acceso a la terraza, hay un peque�o cuarto, que
el portero utiliza para guardar sus b�rtulos, y que casi siempre est� cerrado.
Al pasar por la puerta pude escuchar unos gemidos, y vi que estaba entornada.
Por pura curiosidad, me asom� sin hacer ruido. Lo que observ� me dej� de piedra.
All� estaba mi hija, totalmente desnuda y de rodillas, con el pene del se�or
Masip, un vecino del portal, de 60 a�os, en la boca. El se�or Masip estaba
desnudo de rodillas para abajo, con la mirada perdida en el techo, al borde del
orgasmo. No dejaba de gemir. Mi hija le estaba haciendo una felaci�n de
campeonato, como una verdadera maestra. Me excit� much�simo. Por una lado estaba
enfadado, al ver a un viejo, con mujer e hijos mayores, vecino y conocido m�o,
con su polla en la boca de mi hija, pero tambi�n me sent�a muy excitado y
sorprendido de la abierta sexualidad de mi hija. Pero lo que me sorprendi� fue
que, cada vez que el se�or Masip intentaba acariciarla el pecho, o el cabello,
ella le daba un manotazo en la mano. Con un gemido, �l se corri�, y mi hija se
bebi� toda la leche, sin dejar caer una sola gota. Al acabar, y tras vestirse,
ella alargo sus manos, recibiendo un billete de 20 euros.

-Cuando cobre la semana que viene no me dir�s que no a nada
de lo que te pida, maldita zorra...

-Ya conoces los precios y las normas... Por 20 euros una
mamada desnuda, pero nada de tocamientos....

Mi hija se estaba prostituyendo. Era incre�ble. Nosotros le
d�bamos todo el dinero que quer�a. No comprend� los motivos. Tuve que correr
hacia la terraza, para que no me sorprendieran ninguno de los dos.

Pas� todo el d�a despistado, repitiendo en mi cabeza esa
escena. Por la noche hice el amor a mi mujer de forma salvaje. Ella estaba
encantada, aunque no creo que se le pasase por la cabeza imaginar que estaba
fantaseando con Sara, nuestra hija. La verdad es que nuestra ni�a ten�a un
cuerpo maravilloso. No pod�a pensar en otra cosa.

Pas� los siguiente d�as mirando de reojo a Sara, excitado, y
no tarde de volver a sorprenderla. Fue una noche, que dijo irse a dormir a casa
de una amiga del colegio. Decid� seguirla. Pero no tuve que hacerlo durante
mucho rato, pues ni siquiera sali� del edificio. Entr� en uno de los pisos de la
tercera planta, la casa de un vecino que viv�a solo, el se�or Ram�rez, tambi�n
de edad. Hombre hura�o que apenas ten�a relaci�n con el resto del vecindario....
Y mi hija iba a pasar la noche con �l!!!! No pude pegar ojo en toda la noche,
imaginando a Sara follando con aquel hombre. A la ma�ana siguiente, cuando lleg�
de casa, mir� entre su ropa sucia... Pude ver que se hab�a puesto tanga.. y �sta
ol�a a semen que apestaba... Tambi�n pude ver que ten�a un billete de 50 euros,
nuevo, en su billetero.... As� que mi hija cobraba 50 euros por noche completa.
Era poco para una chica as�. Yo sacar�a mucho m�s...

Pens� que si se estaban "beneficiando" de mi hija una serie
de viejos, por unos euros, lo justo ser�a que su padre, que durante a�os la
hab�a cuidado desinteresadamente, tambi�n pudiera disfrutar de ella. As� que
decid� que Sara se convertir�a en mi amante, costase lo que costase.

El viernes siguiente mi mujer tuvo que marcharse un fin de
semana, a un seminario m�dico en otra ciudad, por lo que Sara y yo pasar�amos
unos d�as totalmente solos. Decid� ir al videoclub y alquilar algunas pel�culas
porno sobre incesto, que dej� a la vista, junto al aparato de DVD. Mi hija
pareci� comprender el mensaje al instante, pues esa noche vino al sof� del
cuarto de estar con una bragas y una camiseta corta, sin sujetador, marcando los
pezones. �Podemos poner alguna de esas pel�culas que has tra�do, �no crees
pap�?. En unos minutos ya le estaba quitando la camiseta y lamiendo sus pechos.
Mientras me dec�a que me hab�a visto el d�a del se�or Masip, en la terraza,
mir�ndoles, y sab�a que le hab�a seguido la otra noche, que pas� en casa del
vecino. Mientras me hablaba no dejaba de pajearme. Siempre he tenido ganas de
hacer esto p�- me susurr�. Bastaron estas palabras para que me corriese
abundantemente en su mano, salpicando por todos lados.

-Joder, c�mo he puesto el sof�.. Como se entere tu madre...

-�Qu� pasa pap�, que mam� no sabe complacerte?.... Si llego a
saber que estabas tan cargado te habr�a dejado que te corrieses en mi boca...
Vamos a mi cuarto, que no quiero que mam� sospeche nada.... All� podr�s correte
a gusto...

Era incre�ble, mi hija dirigiendo toda la situaci�n, diciendo
d�nde ten�amos que follar para no despertar sospechas.

Fuimos a su cuarto. All� nos desnudamos totalmente y
comenzamos a hacer un 69. Estaba totalmente rasurada, como un beb�. Ella limpi�
los restos de esperma del glande, mientras comenzaba a gemir, suplic�ndome que
la penetrase de una vez. La coloqu� boca arriba, puse sus piernas sobre mis
hombros y la penetr� de un solo golpe. La visi�n del mi hija, de esta forma, me
puso a mil y estuve a punto de volver a correrme.

-Eres una putita... Follando con los vecinos por dinero....
�Qu� verg�enza!... Espero que te gustase, por lo menos...

-Ufffff.. pap�.... sigue..... no pares...... UHF..... me
corro....

Ver a mi hija experimentando un orgasmo fue lo que necesitaba
para correrme. Aument� el ritmo de mis caderas. Pens� en eyacular entre sus
tetas, por miedo a dejarla embarazada, pero Sara tambi�n parec�a pensar en lo
mismo.

-No te preocupes... �chame dentro toda la leche que
quieras.... Uhhhhh.... Acabo de tener la regla..... No pasar� nada....C�rrete
pap�..... Uhhhh....

En unos segundos, el esperma que le hab�a dado la vida hac�a
15 a�os, inund� su vagina. Tres o cuatro descargas, que le tuvieron que llegar
hasta la tripa. Ca� casi desmayado sobre ella.

-Se acab� el follar con vecinos por esa miseria.... A partir
de ahora vas a ser mi putita.... Adem�s, conozco a gente que estar�a dispuesta a
follar contigo por mucho m�s que 50 euros....

-Como quieras pap�....