Relato: Mi vecina modelo Nuevamente me pongo en contacto con vosotros para relataros una experiencia de esas que todos quisi�ramos tener mas a menudo. Mientras empiezo a recordarlo para escribirlo mi aparato se pone en erecci�n por que ya os digo que fue una pasada.
Para empezar voy a describiros a la chica en cuesti�n. Se llama Noem�, mide 1�75, complexi�n delgada, ojos verdes, pelo casta�o claro (casi rubio) que suele llevar rizado y 22 a�itos que son una delicia.
He puesto en el titulo vecina aunque no es mi vecina. Me explico. Yo ahora vivo en otro edificio que est� en otra zona del barrio y ella vive en el edificio donde viven mis padres. El caso es que yo a menudo voy a comer a casa de mis padres y luego vuelvo a mi casa. Durante un mes en varias ocasiones la ve�a mientras sal�a del portal y yo estaba arrancando el coche.
Esta chica la he visto nacer ya que yo rondo los cuarenta y hasta hace poco no me hab�a dado cuenta de c�mo se ha puesto de guapa. Realmente me fije cuando me paso una cosa curiosa.
La historia empieza un d�a en el que cuando voy a coger el ascensor, alguien se adelante y me lo quita. Yo de todos modos apret� el bot�n y la sorpresa fue que despu�s de ir al s�ptimo, baj� al tercero. Al abrir la puerta me encuentro con Noem� la cual se est� poniendo un gorro de lana y mir�ndose al espejo mientras se lo coloca. Como es tan alta se estaba echando hacia atr�s, momento en que yo entro y golpea con su culo en mi entrepierna. Ella se disculp� y yo la dije que ya me encantar�a chocarme con chicas como ella todos los d�as. Le dije que no sab�a que el ascensor ten�a memoria y que esperaba que mi interrupci�n no la hiciera llegar tarde.
Ella me dijo que iba bien de tiempo, que le gustaba llegar con tiempo a clase y que no pasaba nada. Como ten�a ganas de hablar le pregunt� que estudiaba y me dijo que estaba en una academia de modelos. Yo la pregunt� que donde estudiaba contest�ndome que se bajaba en la estaci�n de metro de Alonso Mart�nez. Le dije que desde luego yo ser�a un admirador suyo porque me parec�a muy guapa y ella se ech� a re�r sin ponerse colorada como yo esperaba.
Llegamos abajo y le abr� la puerta para que saliera agradeci�ndomelo con un gui�o de ojos. Seg�n me montaba en el veh�culo vi como se dirig�a al metro andando y como se giraba para despedirse. Evidentemente me fije en como vest�a y sobre todo en su culo resping�n. Los vaqueros le sentaban de miedo.
A partir de ese d�a yo hac�a por encontrarme con ella y para ello sal�a de casa y llamaba al ascensor. Cuando estaba en mi piso esperaba que lo llamaran y si ve�a que iba hacia arriba yo le daba a la llamada de ascensor para que luego parara en mi piso. En tres de cuatro veces me encontraba con Noem� y cada vez vest�a m�s sexy, teniendo en cuenta que estamos en invierno.
Yo cada vez le dec�a que la ve�a m�s guapa y ella me dec�a que lo hac�a por que ten�a alguna entrevista o porque las invitaban a fiestas despu�s de las clases, aunque yo sab�a que en algunas ocasiones no eran as�.
Como ya he dicho en alguna otra ocasi�n soy Polic�a y este hecho es conocido por Noem� por lo que en una de sus salidas nocturnas a ella y a una amiga llamada Cristal les robaron el bolso mientras estaban en una discoteca por lo que fue a mi Comisar�a preguntando por mi.
Nuevamente fui el centro de atenci�n de mis compa�eros al aparecer con dos bombones impresionantes. Cristal era una pelirroja impresionante, con ojos verdes y un cuerpazo de esc�ndalo. La verdad es que todos estaban pendientes de ellas y eso que iban en vaqueros. Una vez acabada la denuncia y cuando se desped�an me di cuenta de que quedaba poco para salir por lo que le dije a Noem� que si no le importaba esperarse media hora yo la llevar�a a su casa. Ella me dijo que no le importaba y se despidi� de Cristal. Mientras su amiga se iba no se como la mir�, el caso es que Noem� me dijo: �Si sigues mirando as� a mi amiga as� me voy a poner celosa�. Me re� y la contest� que no era necesario que se pusiera celosa. En ese momento me dijo que no le apetec�a ir a su casa ya que le hab�a dicho a su madre que hoy no comer�a en casa y que iba a estar con Cristal hasta la hora de ir a la Academia. Mientras me dec�a esto me agarr� la mano con suavidad y se la llev� a su mejilla. Le propuso comer en mi casa y que llamar�amos a un telepizza o a un chino lo que le apeteciera, contest�ndome que ya ver�amos, que mucha hambre no ten�a.
Me march� del trabajo antes de tiempo diciendo a mi compa�ero que ten�a que acercar a mi vecina a su casa y nos montamos en el coche. Ya en el coche Noem� me dio un beso muy caliente apretando con sus labios los m�os haciendo que me excitase bastante. Yo empec� a conducir y ella me acariciaba la mano y la rodilla y de vez en cuanto pasaba su mano por la entrepierna notando como mi polla se pon�a tensa.
Llegamos a mi casa pero antes comprob� que no hubiera vecinos en mi planta y entr� con ella sin darla la mano como si fuera un familiar. Nada m�s cerrar la puerta la apoy� contra ella y empec� a besarla largamente mientras le abr�a el abrigo y empezaba a desabrochar su camisa. Llevaba un sujetador blanco de los que se abrochan por delante por lo que en seguida se lo solt�, salieron sus pechos a mi encuentro y yo empec� a besarlos y a mordisquearlos. Ella acariciaba mi cabeza introduciendo sus dedos entre mi pelo. La cog� en mis brazos mientras ella se quitaba el abrigo que cayo en el suelo y la tir� sobre el sof�. Empec� a quitarle los vaqueros baj�ndoselos hasta las rodillas. Ten�a unas braguitas a juego con el sujetador muy sexys con la zona de los laterales muy finos pero que tapaban muy bien su culo.
Ella se quit� los zapatos y se sac� los pantalones y acto seguido me enganch� por el cintur�n quit�ndome los pantalones y baj�ndolos hasta las rodillas. Mi eslip estaba a punto de saltar en pedazos y ella se puso a acariciarme por encima de la tela, notando como se me formaba una manchita de humedad. Yo termin� de quitarme los zapatos y los pantalones y ella sac� finalmente la polla de los calzoncillos empezando a acariciarlo arriba y abajo notando como se endurec�a por momentos.
Cuando ya not� que no crecer�a m�s bajo los calzoncillos al suelo y se meti� la polla en su deliciosa boca. Sus labios eran deliciosos y yo empecer a disfrutar de su lengua y sus manos acariciando. Me fije en el cristal lateral del sal�n de mi casa y la vi como trabajaba con su boca. Imaginaros. Ella sentada en el sof� solo con unas braguitas diminutas y yo de pie delante de su boca viendo como mi polla entraba y sal�a. As� me tuvo durante un rato y cuando note que me iba a correr la separ� y me agache hacia ella besando esos maravillosos labios. La hice levantarse un poco para facilitar el quitarle las bragas y la ech� sobre el sof�. Me arrodille y separ� sus piernas poniendo una de ellas sobre mi hombro y empec� a masajear con mi lengua su entrepierna. Con un dedo acariciaba uno de sus labios vaginales mientras mi lengua chupaba el otro. Mi lengua recorr�a desde su cl�toris hasta el agujero de su culo. Ella gem�a en silencia amarr�ndome el pelo y de vez en cuando acariciando mis mejillas. Noem� se corri� un par de veces mientras mi boca jugueteaba con su co�o. Sus piernas temblaban sobre mis hombros. Cuando vi que la hab�a echo disfrutar me levant� la cog� de la mano tirando de ella y poni�ndola a cuatro patas sobre el mismo sof� la puse mirando por la ventana. Al estar detr�s de ella tambi�n miraba por la ventana y descubr� a una de mis vecinas paseando su perro y mirando hacia mi ventana. Ella me salud� y cre� que no se fij� en que le estaba dando desde atr�s a una mujer. Eso s� supongo que se debi� de pensar que me estar�a haciendo una paja o algo por el estilo por mis movimientos. Vi que se re�a y me tiraba un beso. Esta mujer se llama Vicky y es una de las mujeres que m�s me gustan de la comunidad de vecinos y que me gustar�a tener entre mis brazos pero que a�n no he conseguido. Los dos estamos casados y eso da un poco de reparo a la hora de una aventura aunque creo que puedo tener expectativas despu�s de lanzarme ese beso.
Cuando Vicky desapareci� del campo de visi�n corr� las cortinas y me sent� yo en el sof� pidiendo a Noem� que se subiera sobre m�. Primero lo hizo de espaldas a mi, ech�ndome sobre mi pecho. Yo empec� a acariciar su cuerpo por delante, pasando mis manos por sus pechos, acariciando su ombligo y acariciando su entrepierna mientras mi polla entraba y sal�a. Bes� su espalda recorriendo con mi nariz su columna vertebral. La ped� que se diera la vuelta haci�ndolo sin llegar a sacar mi polla de su co�o encogiendo su pierna al girarse para no golpearme en el pecho. Cuando tuvo ambas piernas alrededor de mi cuerpo empez� a saltar como una salvaje sobre mi polla. Daba los altos con tanta vehemencia que en un par de ocasiones se sali� y me la aprision� contra el cuerpo, haci�ndome un poco de da�o. Sus pechos se mov�an al comp�s de su cuerpo y aunque no son muy grandes me hipnotizaba su movimiento.
De repente la agarr� por la cintura parando su movimiento me levant� agarr�ndola fuertemente para que no se cayera y sin sacarla a�n la llev� sobre la mesa del sal�n y segu� con el mete saca. Ella me agarr� de las mu�ecas fuertemente mientras me miraba con deseo. Se incorpor� y me beso nuevamente con ardor. Yo ya no aguantaba m�s. Llev�bamos unos quince minutos de acci�n y yo ya notaba el temblor de cuando estoy a punto de correrme. Se lo dije y Noem� me pidi� que la sacara y me corriera sobre su cuerpo cosa que hice. Inund� su pecho y su barriga viendo como los goterones se deslizaban hacia su ombligo. Cuando termin� de correrme ella me cogi� nuevamente la polla y la bes� para despu�s introducirla en su boca limpi�ndola por completo. Nuevamente la atraje hacia mi y la bes� largamente jugueteando con su lengua. Me sent� en el sof� y puse sobre mi cuerpo a Noem�. Acariciaba su espalda cuando son� el tel�fono de casa. Era mi mujer que me dec�a que esa tarde llegar�a tarde porque hab�an surgido problemas en su trabajo. Cuando colgu� Noem� me dijo que se pod�a quedar hasta que yo quisiera. Le dije que si le apetec�a comer algo y ri�ndose me dijo que si le parec�a poco lo que se hab�a comido. Me bes� y me dijo que pidi�ramos un chino.
Despu�s de comer echamos otro polvo impresionante esta vez en la cama y luego otro en la ducha.
Espero que os haya gustado esta nueva historia real como la vida misma. Tengo otra m�s con una compa�era de trabajo y con una vecina que ya os contar�.
Besos para ellas y saludos para ellos.
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Relato: Mi vecina modelo
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