Esta vez mi relato fue creado al limite de la morbosidad, una
historia como muchas que se han escrito en estas p�ginas, de relaciones entre
madres e hijos. Nunca jamas en mi vida, hab�a tenido un pensamiento morboso con
mi madre, todo fue producto de mi fantas�a y de otros relatos le�dos en esta
misma pagina. Al pasar un par de d�as, vi que este relato super� todas mis
expectativas. Muchos email me llegaron a mi correo, y conoc� a muchas mujeres,
pero solo por internet, de todas partes.

Hubo dos correo que me llamaron mucho mas la atenci�n que el
resto, ya que se trataban de mujeres mayores, de mi misma ciudad.

Una me felicitaba por mi relato y que me preguntaba si era
real o hab�a sido inventado. No le pude mentir, le dije que solo era producto de
mi imaginaci�n, pero que mi intenci�n era encontrar a trav�s de este relato,
alguna mujer mucho mayor que yo. De ella me hice muy amigo y nos mandamos varios
correos. Su nombre era Angela.

La otra era un poco mas osada, pero no paso mas alla de un
par de email un poco candentes y termin� por aburrirme.

Angela era distinta. Se notaba que era de clase media alta,
trabajaba en una empresa de cosm�ticos y que ten�a un hijo de mi misma edad.

Despu�s de varios email, me confeso que en mas de una
oportunidad ella misma habr�a visto a su hijo, con otros ojos y no precisamente
de madre. Me confeso que con su marido, la llama de la pasi�n se hab�a
extinguido hace tiempo y que ella siempre andaba con la hormonas revolucionadas.

Para hacer mas corta mi historia, despu�s de muchas
conversaciones, la convenc� que nos junt�ramos una noche , en una calle poco
transitada, que fu�ramos a alguna parte a conversar, sin ning�n compromiso y si
se daban las cosas ......

Ella accedi�. Fijamos el d�a, la hora y el lugar. Esa noche
me dirig� a la direcci�n indicada. Era una calle bastante oscura y muy poco
transitada. Ella se hab�a descrito como una mujer de 45 a�os, tes blanca, unos
75 kg. bajita, pero con un pecho y un culo bastante abundante, seg�n me coment�
en broma.

Me encontraba en ese lugar, fumando un cigarrillo, a la
espera que llegara mi cita. De repente, veo un auto que se acerca despacio. Supe
de inmediato que se trataba de ella. Me mor�a de ganas de estar con una mujer
mucho mayor que yo. Siempre hab�a sido ese mi sue�o. Esa noche estaba decidido a
todo.

Veo que el auto se acerca. Apago mi cigarrillo y al levantar
la vista veo a mi madre que era la que ven�a en su auto. Me qued� paralizado. Me
ten�an estrictamente fumar, por un problema de asma que tuve hace tiempo. Nos
miramos por unos segundo y ella se marcho.

Fue ah� cuando me di cuenta que la mujer con la que hab�a
estado escribi�ndome era mi propia madre !!!!!. El mundo se me vino encima y el
p�nico se apoder� de mi. Comenc� a caminar por calles sin ning�n rumbo. Que
hab�a echo. Como volver�a a mirar a mi madre a la cara. Que verg�enza sent�a.
Debo haberme fumado como 10 cigarros uno tras otro. Mis manos tiritaban y un
fr�o invadi� mi cuerpo.

Trataba de inventar alguna excusa, pero todo era demasiado
obvio. Lo �nico que me salvaba era el nombre falso que le hab�a dado. Pero yo
sab�a muy bien que ella sab�a que era yo. Por que de otra manera se hubiese
detenido ........

Nunca jamas me imagine que mi madre podr�a leer esos
relatos...... ni siquiera cuando me dio su descripci�n ....cambio su nombre ...
bueno esa era obvio.

Llegue a mi casa bastante tarde, ya todos dorm�an. Me dirig�
a mi habitaci�n, pero no pude dormir.

Al otro d�a me despert� muy temprano, sin embargo no sal� de
mi habitaci�n hasta cerca de la hora de almuerzo. Mi padre al verme me ech�
bromas respecto a lo bien que ten�a que haberlo pasado ayer, para despertar a
esa hora.

Me di cuenta que mi madre no se encontraba en casa. A la hora
de almuerzo, escuche que el auto de mi madre que llegaba nuevamente me encerr�
en mi habitaci�n. Como a los 10 minutos mi padre entra y me dice que mi madre
ven�a con un terrible dolor de cabeza y que se recost�, pero que hab�a pasado a
comprar almuerzo, a si que almorzamos solos los dos.

En la tarde sal� y no la vi hasta que llegue cerca de las 7
de la tarde. Nos saludamos con un beso en la mejilla, pero muy cortantes ambos.

Ambos fingimos durante toda la semana. Ni ella ni yo,
volvimos a tocar el tema.

El d�a jueves, al abrir mi correo, encuentro un correo de mi
madre.

" Tenemos que hablar, el viernes, a las 21:00, en el mismo
lugar "

Ese d�a en la tarde cuando llego mi madre, el trato fue igual
como hab�a sido durante toda la semana.

Lleg� el d�a viernes. Era casi la hora se�alada y me acerque
al lugar y grande fue mi sorpresa que el auto de mi madre ya se encontraba ah�.
Me acerque a este y me sub�. Mi madre no me mir�, solo puso en marcha el auto y
salimos de la ciudad.

Luego de andar unos 10 minutos, comenzamos a hablar.

Un silencio nuevamente invadi� el ambiente .....

Ella manejo un poco mas y se detubo en una salida de la
carretera. Se adentr� un poco mas hasta alejarnos de la vista de los autos que
pasaban.

Ella se bajo, y yo tambi�n. Nos apoyamos detr�s del auto.

No sab�a que mi madre fumara. La situaci�n era muy extra�a.
La mujer que siempre me hab�a prohibido fumar, ahora estaba a mi lado fumando y
yo con ella.

Ella estaba apunto de llorar. La tom� abrac� y ella me
abraz�.

Nos quedamos en esa posici�n, ella apoyada en mi hombro,
segu�a lament�ndose de su vida. Yo no sab�a que decir. Sent�a los latidos
agitados del coraz�n de mi madre. La bese en la mejilla y ella hizo lo mismo. No
nos dimos cuenta cuando nuestros labios se encontraron.

Era un beso extra�o. Un beso suave, un beso de amor, de madre
a hijo, pero en los labios. Nuestras lenguas comenzaron a acariciare lentamente.
Sus manos acariciaban mis cabellos y mis manos en su cintura ............

Los besos no se detuvieron. Poco a poco fueron aumentando.
Nuestras lenguas recorr�an completamente la boca del otro. Mi verga despert� y
se puso muy dura. Yo sab�a que mi madre la estaba sintiendo. Quise moverme un
poco para dejar de hacerle sentir mi verga, mas ella no me dejo. Un leve
movimiento de su pelvis me indic� que no solo la sent�a, si no que al igual que
yo se estaba excitando.

Mi excitaci�n iba en aumento.... algo me dec�a que deb�a
cortar ese beso, pero mi cuerpo no respond�a. Nuestros movimientos de pelvis
fueron tambi�n aumentando, entreg�ndonos placer mutuamente. Siento como su mano
baja y me empieza a acariciar mi verga por sobre el pantal�n. Yo no me atrev�a
aun a tocarla. Ella me baja el cierre y tomando mi verga entre sus manos
comienza a masturbarme, sin dejar de besarme. El placer era indescriptible. Yo
apoyado en la maleta del auto, reclino mi cabeza un poco hacia atr�s y mi madre
en ese momento baja hasta mi verga y desesperadamente comienza a darme una
mamada espectacular.

Quise detenerla cuando ya no aguantaba mas, pero mi madre,
d�ndose cuenta de lo que suceder�a, no solo no dej� de chup�rmela, sino, que
aumento su velocidad y termine por vaciarme dentro de su boca.

Ella se levant� y sin decir nada, solo me abraz� y yo a ella.
Nos quedamos abrazados por largos minutos.

Nos subimos al auto sin decir nada, casi durante todo el
camino.

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