Antes que nada me llamo Iv�n soy, mido 1.67 peso 68k soy
simp�tico, moreno, de piernas gruesas, gay activo y tengo 22 a�os, vivo en
M�rida, M�xico.

Siempre durante la infancia quise tener mascotas y a los 17
a�os llego el primer cachorro (macho), era un labrador de apenas 2 meses.

R�pidamente el cachorro se identifico conmigo, y entre juegos
un d�a se me acerco tanto al paquete (el cual me mide 17 cms) y lo olfateo,
dicho percance paso desapercibido. Con la calentura de los 17 a�os me hac�a en
promedio tres pajas al d�a que hasta hoy realiz�.

Pasaron los d�as de las pu�etas interminables, pero no
quedaba satisfecho y quer�a ir m�s all� de las experiencias, entre hombres, y un
d�a se me ocurri� sacarme la verga mientras jugaba con el cachorro, r�pidamente,
Brand�n (as� lo llame) se acerco olfateo y le dio un par de leng�etazas, que me
hicieron pensar miles de cosas.

As� fueron pasando los d�as en que el peque�o perro me daba
leng�etazas que en vez de calmarme solo me incitaban a jal�rmela cada vez m�s y
m�s, hasta que un d�a me quede solo en casa y decid� dar un paso m�s; lo
siguiente era venirme en la boca del perro par comprobar si le iba a gustar mi
leche caliente, abundante y espesa, y as� sucedi� al muy puto le encanto
tragarse mi leche.

Conforme transcurr�a el tiempo decid� entrenarlo, meti�ndole
peque�os objetos por el culo al perro, que al principio como era de esperarse le
desagradaban, pero poco a poco se iba acostumbrando, y ya no le desagradaban,
sino que, simplemente paraba la cola y se iba dejando follar por los objetos,
mientras lo entrenaba no pod�a dejar de jal�rmela, pensando en que pronto
llegar�a el d�a en que le metiera la verga a mi perro Brand�n, solo era cuesti�n
de esperar el momento y la oportunidad adecuada.

Al cabo del a�o de edad del perro decid� dar el gran paso, ya
que mis papas se hab�an ido de viaje a Canc�n y no regresar�an hasta dos d�as
despu�s.

Me espere hasta la noche sub� al can a mi cuarto lo prepare
unt�ndole un poco de aceite en el culo como era costumbre, me desvest� y
r�pidamente le acerque mi verga a su hocico que ya con gran habilidad
leng�eteaba, pero esta vez ser�a diferente ya que no solo quedar�a ah�, sino
que, le romper�a el culo a Brand�n.

Era tanta mi excitaci�n que sent�a los huevos llenos de leche
ansiosa de depositarse en el culo del perro, despu�s de los leng�etazas, decid�
dar el siguiente paso me coloque de rodillas detr�s del perro, y apunte mi verga
ya erecta a su m�ximo, y le fui introduciendo la cabeza lentamente bien adentro.

El perro solo se quedaba quieto le estaba gustando, y de
pronto lo sujete fuerte de las caderas y se la ensarte de golpe, el perro pego
un chillido de dolor que lejos de molestarme solo me hincho aun m�s la verga,
era tanta mi excitaci�n que le empec� a bombar el culo como nunca se lo hab�a
hecho a alg�n puto, el pobre perro solo le quedaba darse la vuelta par lamer su
culo adolorido y as� me masajeaba los huevos, lo cual me hacia sentir incre�ble,
en esta faena tardamos como 30 minutos aproximadamente, hasta que no pude
contenerme m�s y explote en gran cantidad llenadole de leche el culo a Brand�n,
luego de un rato le saque la verga lentamente. El perro solo se fue a echar al
pie de mi cama a lamerse el culo reci�n violado el cual escurr�a de leche, le
acerque mi verga de nuevo y empez� a limpiarla. Dicho encuentro se repiti�
varias veces a lo largo de los d�as en que estaban de vacaciones mis papas.

As� es como me cog� a mi perro por primera vez, y dicho
encuentro se volvi� m�s com�n hasta llegar al punto en que ya solo se dejaba y
ya no hacia nada por sacarse mi verga.

Espero y sea de su agrado este relato que es real.