Relato: Accidente en la Jungla (2)
ACCIDENTE EN LA JUNGLA (2)
Como dije, intent� dormir y creer que todo hab�a sido una
pesadilla. Quiz� se me critique por no dar m�s datos ni detalles sobre mi
persona o mi forma f�sica, pero ni tan siquiera el nombre de Cristina es real.
Como ya dije soy bastante popular, me podeis ver a trav�s de la peque�a
pantalla, y solo me faltar�a que los obsesos que se masturban a mi costa me
imaginaran tambien en estos trances. Tampoco entro en detalles asquerosos que
sirvan para calentar a los viciosos a costa de mi desgracia; si hago esto es
porque necesito contarlo, necesito expresarlo para sentirme bien conmigo misma.
No hago nada por nadie;como ya dije, solo me importa mi vida y mi carrera
profesional; �egoista?, bueno, yo m�s bien dir�a que sincera, muy sincera. As�
que si os quejais por que ahorro detalles de la humillaci�n que sufr�, me
alegran m�s vuestras quejas que vuestros halagos, sin duda, llenos de
masturbaciones.
Al despertar, sent� junto a m� al misionero. Se llamaba Joaqu�n, y era de un
pueblo de Navarra. �mpez� a hablarme y yo le segu� la conversaci�n, en parte por
intentar olvidar lo de la noche anterior. Ambos charlamos durante largo rato,
hasta que al fin, �l saco el tema.
"Mira, -me dijo- lo de la noche anterior..." . Yo escuchaba un poco llena de
rabia y odio ante la humillaci�n que pas�. "... pues -continu�- en la tribu
andan todos un poco revueltos, entiendel�... y... yo, hijita, como buen pastor
que intento ser y ante esta delicada situaci�n que est�s pasando pues yo... "
"Siga, -le dije- digame de una puta vez que quiere decirme...". "Pues -me
dijo-... yo intento mediar entre usted y ellos. Ahora mismo, en el poblado no se
habla ni se piensa en otra cosa que no sea usted. Puede verlo; salga afuera y
ver� como los 32 miembros que forman la tribu caminan con dificultad debido a la
... la erecci�n que llevan. Yo intento por su bien que esto no se convierta en
org�a, y , viendolo por el lado positivo, ellos son y seran muy cuidadosos con
usted, ya que, al fin y al cabo, es usted lo �nico que tienen. Claro que
tambien... " hizo una pausa. Se ruboriz� y me habl� con un poco de dificultad.
"Tambien se habla de lo de anoche y... las noticias vuelan. Por lo visto, el
viejo hechicero est� fascinado con como usted le..." "�Basta! -grit�-, no hace
falta que me diga detalles...". Me pon�a furiosa, indignada...
As� que, el puto viejo despues de haberle pegado la mamada de mi vida, iba por
ah� cont�ndolo y poniendo m�s calientes a esa sarta de salvajes. JODERRRRR.....
�Que era yo? YO, YO, YO.... la famosa, la buenorra, la bell�sima, la escultural,
la simpatiqu�sima puta de un poblado indigena ?....
ME CAGO EN TODO....
El Padre Joaqu�n sigui� habl�ndome de lo pactado con ellos para hacerme el
trance m�s delicado; hab�a resuelto que esa tarde lo har�a con el jefe, solo con
el jefe, y as�, la cosa no ser�a tan... como si....( JODERRR...., �Que
mierda!...). Le ped� que se marchase, que quer�a quedarme a solas.
Comimos fuera de la tienda. Durante la comida y el paseo por el poblado, pod�a
ver como todos me miraban excitados mientras sonre�an y v� tambien la tremenda
erecci�n que llevaban esas bestias a mi paso.
Ninguno se atrevi� a tocarme, ni a acercarse. Parec�a que mi persona les induc�a
algo de respeto y admiraci�n, lo cual, en parte me enorgullec�a.
Tras la comida, me quedaba otra comida.... la del jefe. Le iba a tener que
comer la polla a ese puto negro.... MIERDA. Pens� en negarme, en ingeniarme algo
para evitar aquello tan desagradable;... pero, al descubrir el Padre Joaquin mis
intenciones, me disuadi� de la manera m�s l�gica. Ulma, el piloto que nos hab�a
llevado a aquella puta selva y que nos acompa�� hasta el poblado hab�a sido
abandonado en la selva por esos salvajes con el fin de evitar una mezcla de
sangre y... solo se encontrar�n partes de sus huesos. Ante tal amenaza, y
sabiendo que toda escapatoria ser�a en vano, me acerqu� resignada hasta la
tienda del jefe, del cual ignoraba quien era, ya que no lo hab�a visto durante
la comida.
Entr� en la tienda que me indic� el misionero y sent� como tras de m� se cerr�
el pligue de telas que hac�a de puertas. El jefe...�ja!... el jefe era un negro
gordo, gord�simo que estaba sentado en una especie de silla que le serv�a de
trono. Deb�a pesar a lo menos 160 Kg, . Parec�a que se hab�a quedado all�
encajado en su trono y que lo dejaron de jefe por que no lo podr�an desencajar.
El puto gordo aqu�l ten�a la polla empalmada y sobresal�a entre los pliegues de
su barriga.
Sonre�a el hijoputa... sonre�a al verme. Yo sab�a que �l no se podr�a mover de
all�, as� que... me acerqu�.... �Joder, no s� ni c�mo lo hice! � C�mo tuve
fuerzas para hacerlo!...
Mientras me acercaba pens� que si aqu�l animal estaba ya bien excitado, si yo
lo provocaba un poco, quiz� acabara antes.Era lo unico que esperaba: que acabara
pronto de correrse para acabar de una puta vez con aquello.
Me port� como una puta... s�, tuve que hacerlo... Me fu� acercando lentamente
para calentarlo m�s. Empez� a desnudarme mientras le sonre�a con cara traviesa,
con esa misma cara que pongo en la tele para excitar a los espectadores, al
tiempo que pude ver en su cara un enorme asombro al ver mis pechos, mi
trasero... vamos, mi cuerpo, ya sabeis... QUE CABRON.... Estaba viendome en
bolas.... LO QUE PAGARIAN POR AHI POR VERME AS� y ahora lo estoy haciendo con un
salvaje gordo y asqueroso....
Le pas� mis pechos por su polla, frot� mi trasero contra ella al tiempo que �l
me agarraba los pechos; DIOS, QUE HUMILLACION!!!...
Cuando sent� que ya no pod�a aguantar m�s aquello, me arrodill�, met� la cabeza
entre sus grasientas piernas y me tragu� la polla de aquel bicho. Yo ni lo
consideraba humano. Era algo tan amorfo que...
Se la chupaba con asco, asco, y... El GRAN CABRON AQUEL, sobreexcitado se ech�
adelante, me rode� con sus inmensas piernas, me atrap� entre sus carnes y
me dej� all� encajada. NO PODIA NI MOVERME. Sab�a que se la ten�a que chupar lo
mejor que pudiera para no afixiarme y poder salir cuanto antes de aquella mole
asquerosa... El gem�a, gem�a y gritaba...CIELOS, COMO GRITABA.... para m� que se
lo estaba haciendo mejor que al hechicero... y s�, le d�, le daba con la lengua,
le daba con ganas, se la succionaba como una aspiradora Y ME JODIA M�S LOS
GRITOS DE PLACER DE AQUEL PUTO GORDO.... GRITABA Y SE LO ESTABA PASANDO PIPA A
COSTA M�A... CABRON, CABRON...HIJOPUTA... pensaba mientras le daba ca�a a la
lengua.
Yo pensaba que aquello no iba a acabar, estaba agotada, sudando, atrapada entre
la mole de carne de aquel bicho mientras le pegaba una mamada de
campeonato... Al f�n �l se vino.... DIOSSSSS...... PUFFFF estuvo corriendose un
minuto por lo menos..... DIOSSS.... como me llen� de aquella leche.... parec�an
litros...me la tragu� toda, toda..... DIOSSS....QUE ASCO, QUE ASCO, QUE ASCO...
AGGGG, me llenaba la garganta y no paraba el bicho aqu�l, ...UFFFF, ME LO TUVE
QUE TRAGAR TODO...me sent�a m�s puta que ninguna... me jod�a todo aquello...
Al poco de acabar, se relaj�, se ech� hacia atr�s y me dej� salir de aquella
mole de grasa que me atrapaba. El asco que sent�a no me hizo atender al jaleo
que hab�a fuera de la tienda. Se o�an gritos, disputas y jaleo... Entr� uno de
los de la tribu acompa�ado por le padre Joaqu�n. Yo intent� cubrir mi desnudez,
pero pese a todo, s� que me vieron.
Hablaron alarmados con el jefe. Por lo visto, por lo que me cont� el misionero,
los gritos del jefe hab�an excitado aun m�s la l�bido y el deseo de los del
poblado, los cuales estaban como locos y prestos a una revuelta. El puto jefe
(que hab�a acabado de tener la mamada de su vida conmigo) vi�ndose cuasi
destronado ante una rebeli�n de su pueblo, accedi� a sus determinaciones. El
sacerdote mediaba, y yo estaba que echaba chispas al sentirme la puta, el objeto
de deseo, la moneda de cambio de aquellas bestias asquerosas. Acordaron que s�lo
se lo har�in cuatro negros ese d�a conmigo ...JAJAJAJAJAJA......QUE HIJOS DE
PUTA.... �QUE ME VOY A TENER QUE... A CUATRO?....JAJAJAJAJA...
Pero sab�a que no me quedaba otra....
No recuerdo cuanto pas� ni nada m�s... estaba tumbada en mi tienda, aguardando.
Afuera se o�an jaleos del que, sin duda, ser�a el sorteo de los elegidos... y yo
era el premio. Me acord� cuando era yo en la televisi�n la que repart�a los
premios y ahora... MIERDAAAAAAA.....
Estaba desnuda, tumbada.... entr� el primero.... Yo ya no pod�a tragar m�s
leche, as� que dej� que se acercara el primero y ni me mov�... Ten�a una buena
tranca y era un chaval jovencito, de unos 15 o 16 a�os. Se acerc�, separ� mis
piernas y de un empuj�n me meti� aquello...AGGGGG, grit�.... Me doli� la
violencia con que me penetr� en seco, pero �l se encontraba extasiado,
alucinado, poseido, y se mov�a sobre m� como un loco... No s�, no s�... quiz� el
clima, el lugar o el morbo pero empez� a lubricarme y sent�a un extra�o
placer... aquel bicho, sobre m�, enfurecido, poyes�ndome... gritandoooo...... le
rode� con mis piernas y empez� a mover mis caderas con fuerzas.... agggg... se
corri�. se corri� dentro de m� enseguida... Estaba hiperexcitado ... cay� sobre
mi pecho rendido y yo... sent�a una excitaci�n como nunca antes... Al entrar el
otro, debo confesar que me alegr�... Ahora me arrepiento de todo. No s� como
pude portarme as�... era otro chiquito, este si acaso m�s joven. No le di�
tiempo ni de acercarse. yo misma me introduje la polla en mi vagina y empez� a
moverme. �l, sobre m�, cabalgaba... y al sentir mi cuerpo, mi olor de hembra en
celo, mis pechos, mis caderas agitadas y mi excitaci�n, se corri� casi
enseguida...."� MIERDA!", - pens�.....ya no pod�a m�s, estaba llena de rabia,
asco, repugnancia y un ardor y deseo que ansiaba culminar... lo ech� de all� y,
dirigiendome a la puerta cog� enseguida del brazo al que le tocaba el turno. Era
un viejo flaco y desdentado, un tipo asqueroso, pero era tal mi excitaci�n que
hasta la bestia m�s desagradable me atra�a... lo tumb� con violencia en el
suelo, me met� la polla y empec� a cabalgar... sent�a todo mi cuerpo
convulsionado, estaba abstraida, no sab�a lo que hac�a... me estremec�a y
gritaba mientras cabalgaba sobre la polla de aquel asqueroso viejo. Pude ver en
�l la cara de asombro. � C�mo no !, en su vida se hab�a follado una t�a como
yo... segu�a moviendome con violencia, gritando, gimiendo, mientras mis pechos
bailaban al aire... DIOS, NO SE COMO PUDE SER TAN... el hombre gem�a, suspiraba,
parec�a que iba a acabar con �l; parec�a que era yo la salvaje, que lo iba a
matar a polvos...
En un momento sent� un latigazo por todo mi cuerpo, me acerque a la boca del
viejo y le d� un asqueroso beso con lengua entre sus desdentadas enc�as... no s�
como pod�a, pero, en aquellos momentos, me pod�a m�s la excitaci�n que el asco.
Sent� que reventaba por dentro, que explotaba en un orgasmo bestial. al poco que
el viejo (que cre�a que se me iba a morir), me abrazaba y se corr�a dentro de
m�...
Agotada por aquel polvo (sin duda el mejor de mi vida, aunque me duela
reconocerlo), me tumb� a un lado a descansar mientras aguardaba la entrada del
cuarto de los salvajes al que yo que le hab�a tocado en premio...