Como una jovencita nos pervierte a m� y un amigo, y acabamos
descubriendo que es una autentica ninf�mana.
Todo comenz� hace ya cerca de 30 a�os, ella, Susana, tenia 17
a�os reci�n cumplidos y yo era 7 a�os mayor que ella.
Nos conocimos en una cena, la tenia sentada a mi lado derecho
y a mi izquierda una chica con la que hacia tiempo quer�a follar y no hab�a
forma.
Me pus a poner mi mano en la rodilla de Susana que estaba a
mi derecha, como si no sucediera nada, como ella no protesto, comenc� a subir mi
mano, cada vez m�s arriba, hasta llegar a sus bragas, estas estaban un poco
mojadas. Las aparte un poco y le introduje dos dedos en su vagina, jugueteaba
con su cl�toris. Mis dedos estaba chorreando. Me fije en que, mas de una vez,
cerro los ojos.
Cuando la cena finalizo, al salir y pasar justo por delante
de ella, nos besamos, su beso fue largo, nuestras lenguas se buscaron.
Ya en la calle me fije como aquella jovencita iba vestida.
Levaba una camiseta escotada y muy ajustada, una falda rosa, algo corta y unos
zapatitos negros con calcetines blanco. Vamos, como una colegiala.
Como todo el mundo ya se iba a casa la tome de la mano y le
dije
- �Vamos a alg�n sitio?
- S� � un s� suave, con deseo
Fuimos a buscar mi auto y nos fuimos a mi casa, en el camino
le estuve metiendo mano en su cl�toris, mientras ella me tocaba la polla por
encima de los pantalones.
En el ascensor nos pusimos a besarnos, le levante la falda y
le puse la mano en el culo, la chica era una experta besando.
Nada mas cerrar la puerta de casa, casi sin tiempo a nada,
nos desnudamos, sus pechos, no muy grandes, eran perfectos, su culo precioso.
Ella cogi� mi polla y se la meti� en la boca, mamaba como una experta a pesar de
sus 17 a�os.
La eche en la cama y le clave la polla, ella rodeo con sus
piernas mi cintura. Oh dios como follaba esa chiquilla. Estaba claro que ni era
virgen y ni era la primera vez que se abr�a de piernas.
Hacia tiempo que no disfrutaba tanto con un polvo, cuando nos
corrimos cogi� mi pene y se lo meti� en mi boca, luego me mordisqueo los huevos.
Cuando la deje en su casa, hice repaso mental de lo sucedido.
No pod�a creerme lo que me hab�a sucedido, hab�a dado con una autentica mina.
Una jovencita que promet�a.
Durante toda la semana estuvimos follando, ella era todo una
experta a pesar de su edad (pensad que esto fue hace 30 a�os) lo cual me hacia
sospechar que Susana era una ni�a precoz en la cama.
Con el tiempo supe que su experiencia la adquiri� a los 12
a�os, o sea que desde su tierna infancia o adolescencia no hab�a parado de ser
follada.
Pues bien, a los diez d�as de salir con Susana fuimos casa de
un amigo despu�s de cenar a ba�arnos en su piscina. En el agua entre juegos y
bromas acabamos los 3 desnudos, mi chica estaba feliz vi�ndonos las pollas,
ahora tocaba una, ahora la otra, yo estaba un poco celoso, pero me divert�a
seguir con aquella juerga.
Ya en casa de mi amigo, mientras Susana y yo nos sec�bamos en
un dormitorio se puso a chuparme la polla, en eso estaba ella cuando entro mi
amigo completamente desnudo. Sin que nadie le dijera nada se acerco y mi chica
cogi� su polla y tambi�n se la chupo. Yo alucinaba.
Mi amigo, sin siquiera pedir permiso, se puso detr�s de ella
y la penetro por detr�s, mientras me chupaba la polla. Viendo aquello, sospeche
que no era la primera vez que aquella jovencita hacia un �menage a trois�.
Susana y yo nos quedamos toda la noche en casa de mi amigo,
nos la estuvimos follando hasta la madrugada.
A partir de ese d�a Susana follaba conmigo, o con mi amigo o
con ambos, estaba claro que esa chica no tenia remilgos a la hora de abrirse de
piernas.
Mi amigo y yo no tardamos en alucinar con ella cuando un d�a
estando ella encima de m� follando y mi amigo con su polla en su boca Susana le
dijo
- M�temela por detr�s
Mi amigo dijo
- �por donde?
- Por el culo tonto � ella se agacha hacia mi dejado
accesible su culo
Cuando estuvo enculada, los tres nos volvimos como locos, con
mi amigo, nos fuimos turnando en el culo de Susana.
Durante todo el verano, los tres, fuimos inseparables, tanto
de d�a como de noche, ella nunca tenia suficiente, siempre quer�a m�s.
Mi amigo y yo averiguamos que la jovencita hab�a dejado de
ser virgen a los 12 gracias a un compa�ero de clase y que a los trece, durante
el curso, se follo a toda la clase. A los 14 se hizo amante de su profesor de
gimnasia, que fue quien la inicia en el sexo anal. A los quince estuvo interna
(por buena ni�a) y poco pudo follar. Pero a los 16, de vuelta del internado,
conoci� a un chico y estuvo saliendo con el durante 6 meses, pero la muy jodida
tambi�n se l�o con el padre de su novio sin que este nunca lo supiera.
Como pod�is ver nuestra amiga Susana era una autentica
ninf�mana, despu�s del verano le perdimos la pista.
Pero hace ahora dos a�os me la encontr� en unos grandes
almacenes de la ciudad y os puedo asegurar que ahora, ya toda una mujer, es mas
puta que de jovencita pues en el vestidor de ropa para se�ora me hizo que la
enculase.
Desde entonces mi amigo y yo somos unos amantes mas de su
larga lista de amigos, y amantes.
Una noche en una fiesta, Susana trajo a su hija de unos 19
a�os, cual no seria nuestra sorpresa (no s� porque nos sorprend�amos de una
mujer como ella) cuando su hija resulto ser tan puta como la madre.
Y no ten�an ning�n reparo en compartir amantes, ni siquiera
en el mismo momento como nos sucedi� a mi amigo y yo al cabo de unas semanas
Estabamos con Susana en casa follando cuando llamaron a la
puerta, me puse un albornoz y sal� abrir. Era Susana hija, que por cierto se
parec�a mucho a su madre de joven.
- �Hola! � atine a decir
- �esta mi madre? � no supe que responder
Ella no se corta
- �mama! � grito desde la puerta
Su madre se asomo por la puerta de la habitaci�n y le dijo
- Pasa
Al ver a su madre desnuda en la cama con mi amigo dijo
- �caray mama! Como lo estas pasando
- Ap�ntate, hija.
En un abrir y cerrar de ojos, Susana hija estaba desnuda
comi�ndole la polla a mi amigo, la madre se acerca a m� y se puso a mamarme la
m�a.
Mientras me follaba a su madre, la hija chupaba la polla de
mi amigo y tambi�n la m�a cuando la sacaba del co�o. Luego cuando las enculamos
se pusieron a besarse, aquello era demasiado para nuestra moral. Madre e hija
bes�ndose mientras les clav�bamos nuestras pollas en el culo.
Nosotros nos corrimos pero ellas dos siguieron bes�ndose y
chup�ndose el co�o, el culo, sus pechos, un espect�culo incestuoso al que no
estabamos habituados.
Hasta hoy, como ya os he contado, madre e hija nos usaban de
amantes.