Siempre quise comentar con alguien lo que nos sucedi� en casa
con mi esposa (la que llamar� Ver�nica, es una trigue�a alta delgada de bonita
figura, no exuberante, pero tiene un buen atractivo), pero no me atrev�a, por
razones obvias, hasta que un d�a me met� a Internet y le� los relatos que ah� se
reproduc�an, entonces eso me anim� a publicar nuestra maravillosa experiencia.
Resulta que ten�amos una criada, que iba a nuestra casa tres
veces por semana, ya que ambos trabajamos saliendo muy temprano en las ma�anas y
llegando todos los d�as muy tarde, casi de noche, los d�as s�bados se hacia
acompa�ar por su hija, de entonces 16 a�os, para as� terminar temprano los
quehaceres de la casa y retirarse a mediod�a. Pilar, as� se llama la hija, no es
ning�n monumento de mujer, como siempre presentan en los relatos.
Es una morenita de estatura normal, con unos senos
exquisitos, propios de la edad, de cara simpaticona m�s bien picaresca y siempre
anda con la sonrisa a flor de labios, con un trato muy suave, lo que la hace ser
m�s amorosa y tierna.
Fue as� que un d�a s�bado de verano me termino de duchar y
salgo desnudo a la pieza, como es mi costumbre, y ah� estaba Pilar, haciendo el
aseo del dormitorio. En la ducha estaba con algunos pensamientos er�ticos
relacionados con una pel�cula que hab�a visto por televisi�n en la noche, por lo
que sal� con mi pico, como le decimos en Chile, entre que quer�a estar erecto y
no, tiene un tama�o de 19 cent�metros, por lo que ofrec�a una buena vista. Pilar
me salud� y qued� con la vista clavada en mi entrepierna, yo me cort� y no ten�a
con que taparme, por lo que di med�a vuelta y regres� al ba�o en busca de una
toalla que result� ser chica de esas de mano, para cubrirme e inmediatamente
volv� al dormitorio con un morbo espectacular.
Atin� a decir, hola Pilar, como est�s, disculpa la aparici�n.
No se preocupe Don. Ra�l, deber�a haber avisado que estaba aqu�. Mientras nos
dec�amos esto, mi erecci�n iba en aumento y se marcaba exageradamente en la
toalla peque�a.
Pilar me miraba y se le dibujo nuevamente esa sonrisa p�cara
en su cara. Por favor alc�nzame esos short que est�n en el vestidor, dije,
sujet�ndome la toalla. Ella los tomo y me los pas� casi sin despegar la vista de
mi bulto, que a pesar de mi morbo trataba de minimizarlo. Medio de lado y aun
mostrando alg�n recato me desprend� de la toalla y me puse los short, y
nuevamente me volv� hac�a Pilar, que siempre con su sonrisa segu�a mirando el
bulto que se formaba en el pantal�n. Me puse una polera y pas� por su lado para
salir del dormitorio, con el temor que mi esposa me viera as� de caliente, juro
que sin querer, al pasar por su lado la toque con mi pico, aumentando mi morbo,
ella solo hizo el adem�n de hacerse a un lado para que yo pasara, pero no dijo
nada.
Me fui a donde estaba mi esposa arreglando una ropa en otro
dormitorio, vistiendo solamente con una camisa de dormir cort�sima, sin nada por
debajo, en una posici�n semi agachada se le ve�an ambos hoyos, vagina y ano, por
lo que llegue y la tom� por la cintura haci�ndole sentir mi pico, no la
sorprendi� ya que siempre actuamos igual, con la diferencia que yo me encontraba
tan caliente por la situaci�n que hab�a tenido hace unos segundos, que me corr�
el short y se lo met� de un viaje, ella reclam� al principio pero luego se quedo
gozando al sentir lo caliente que yo estaba que la hizo tener un orgasmo casi de
inmediato, y a la vez yo tambi�n acab� botando gran cantidad de semen que le
corri� por las piernas cuando se lo saqu�, debiendo recurrir a un pa�uelo para
limpiarla.
Ver�nica me pregunt� que qu� me pasaba, a lo que respond� que
nada que al verla en esa posici�n me hab�a calentado, diciendo en tono de broma
nada nuevo en ti si vives caliente, respond�, es que ahora ha sido
diferentementerico, con un tono de complicidad.
Sal� al patio ha hacer algunos arreglos de plantas, d�ndome
vueltas en la cabeza las situaciones vividas y no pod�a sacarme la imagen de
estar desnudo delante de Pilar y que ella me mirara sin decir nada y sin
siquiera tratar de salir de la pieza cuando solt� la toalla y me puse el short,
o cuando pas� por su lado y la roc� con el pico totalmente parado, en esos
pensamientos estaba cuando sent� que llegaba Pilar a mi lado y me dice, la
se�ora Ver�nica lo llama, que vaya de inmediato, lo primero que se me vino a la
mente que Pilar le hab�a contado algo y me preocup� de entrar a dar
explicaciones o tener alguna discusi�n por mi falta de cuidado al andar siempre
desnudo, etc., llegu� al dormitorio y Ver�nica estaba en la ducha, me acerco y
me dice, f�jate que entr� al dormitorio y encontr� a Pilar mir�ndose al espejo y
con una mano se tocaba los senos y con la otra el entrepiernas, al verme se puso
roja y sigui� haciendo el aseo, y cuando me desvest� para ducharme me fije que
hab�a quedado un poco abierta la puerta y ella me miraba con una tremenda
sonrisa, lo que me ha producido cierta excitaci�n que no hab�a sentido nunca,
ser�a donde tu me hiciste gozar que ven�a aun excitada. Met� mi mano a la ducha
y la empec� a masturbar, cont�ndole lo que a mi me hab�a sucedido antes con
Pilar, al principio como que se quiso escandalizar, por la madre de la ni�a,
pero en la medida que iba cont�ndole la actitud de Pilar y seguir masturb�ndola,
se seren� y tubo un orgasmo tremendo, tom�ndome el pico y se lo llev� a la boca
trag�ndoselo entero, �vida de sexo, lo chupaba con frenes�, calent�ndome de tal
manera que me saqu� polera y short meti�ndome a la ducha, donde continu�
chap�ndolo por un rato mas luego la di vueltas y empec� a met�rselo por la
vagina y con un poco de jab�n le met� un dedo luego dos, tres y hasta cuatro
dedos en el ano, logrando un nuevo orgasmo con grititos, suspiros, quejidos que
me llevaron a una acabada brutal. Nos salimos de la ducha abraz�ndonos y
bes�ndonos, ambos a�n calientes, por lo que pensaba cada uno.
A todo esto eran las dos de la tarde, se fue la madre con la
hija, no sin antes despedirse de nosotros, Pilar me mir� y me regal� una sonrisa
exquisita, como que lo sucedido le hab�a gustado mucho, Ver�nica de reojo vio
como nos mir�bamos y luego le regal� una sonrisa a ella, como diciendo, a ti
tambi�n te vi desnuda.
Durante el d�a no comentamos en ning�n momento lo sucedido,
dedic�ndonos a las tareas propias del d�a s�bado de la gente que trabaja toda la
semana, ir al supermercado, arreglar cosas en la casa, prepararnos para ir a
comer a casa de mis suegros, por el cumplea�os de una de mis cu�adas, que est�
bastante buena, a la cual le he tocado los senos en reiteradas ocasiones, por lo
que me aprestaba que al saludarla nuevamente se los tocar�a. Por la noche cuando
regresamos, nos acostamos y empezamos a tener sexo y a conversar lo de la
ma�ana, ambos lo ten�amos en mente, lo que nos hizo alargar la relaci�n y hacer
una infinidad de posturas, que Ver�nica me lo chupara, yo a ella en magn�ficos
sesenta y nueve, miles de orgasmos de parte de ella y dos acabadas m�as, una en
su vagina y otra en el culo, concluyendo que a los dos nos hab�a gustado
sobremanera exponernos desnudos delante Pilar.
Quiero acotar que con Ver�nica siempre hemos tenido una muy
buena comunicaci�n en todo tipo de temas, confes�ndome que una vez cuando ni�a
de catorce o quince a�os, una amiga primero y al tiempo despu�s una prima hab�an
tenido una peque�a relaci�n sexual con ella, cosa que nunca la repiti�, pero si
que fueron muy de su agrado, dej�ndola con ese sabor de haber probado m�s, pero
no fue. Yo la incitaba a que por que no lo hac�a de nuevo, a lo que me respond�a
tal vez alg�n d�a se d� la ocasi�n pero no termina de convencerme, hacerlo,
quiz�s.
Durante la semana se repitieron las noches de sexo,
comentando el tema de Pilar, hasta que el d�a viernes me atrev� a proponerle a
Ver�nica hacer algo con Pilar, como mostrarnos ambos desnudos en una forma de lo
mas natural y ver la reacci�n de ella, en un principio no estuvo muy de acuerdo
pero con la calentura me dijo que bueno, pero con mucho cuidado que no se fuera
a notar que estaba preparado y a la chiquilla le pareciera mal y se lo contara a
su madre. Para suerte nuestra, la madre de Pilar hab�a amanecido con un resfr�o
muy fuerte que la oblig� a quedarse en cama ese d�a, y mandar sola a ella. Lleg�
mas temprano que de costumbre iniciando las labores de aseo con mucho sigilo
para no molestar, al sentirla nosotros que estaba sola la llamamos al dormitorio
y le preguntamos por su madre, comunic�ndonos que se encontraba enferma y que
ella har�a las cosas hasta terminar, luego de mucho tira y afloja pusimos en
campa�a nuestro plan. Ver�nica se levant� a la cocina, por instancias m�as, con
un Baby Doll casi transparente, cort�simo, sin calzones, con el pretexto de
ayudarle en algo, cualquier cosa, la idea era mostrarse e ir tanteando el
terreno, volvi� al dormitorio y me cont� que Pilar la miraba extasiada, m�s bien
fascinada, como que se hab�a encontrado un tesoro, entonces se duch� se puso un
buzo y sali� de compras al supermercado, pero la idea era dejarnos solos y
regresar sin que la sinti�ramos.
Yo calcul� que se acercaba y me met� a la ducha, para salir
cuando Pilar estaba ya en la pieza, todo esto me provoc� una erecci�n fenomenal.
Pas� al dormitorio dejando la puerta del ba�o mas abierta que junta para que
luego al regresar Ver�nica se escondiera ah�, de donde se abarcaba todo el
dormitorio. Al salir me encuentro con Pilar de frente y me queda mirando con la
vista clavada en mi pico, yo para tratar de disimular un poco me pongo de lado y
le dije, otra vez me ves as�, no se preocupe me contesta, ya me estoy
acostumbrando a verlo desnudo, y te desagrada le pregunto, no de ninguna manera,
a mi tambi�n me gusta andar desnuda en mi casa, que rica debes verte desnudita
dije. Ella ri� mas p�cara que antes, lo que me motiv� a tocarme el pico y pasar
a buscar el short, claro que ahora no fue sin querer si no que lo hice
premeditadamente de rozarla con mi miembro, como ella no se movi�, entonces la
abrac� por la espalda y me apret� a su cuerpo haci�ndole sentir lo duro que lo
ten�a, se gir� y me puso las manos en el pecho y me apart� diciendo que por que
lo hac�a, bueno me gustas y me excit� mucho el pensar que en tu casa andas
desnuda, acto seguido la vuelvo a abrazar y me aprieto a ella de nuevo, si est�
vez no me rechaz� y tambi�n se apret� a mi fundi�ndonos en un abrazo, comenc� a
hacerle cari�o en el pelo d�ndole besitos y a correr las manos por su espalda,
ella levanta su cara y me ofrece su boca, la que beso con ansias meti�ndole la
lengua creo que hasta la garganta, nos besamos con gran pasi�n, me sent� en ese
momento en los cielos. Miro por sobre su cabeza y veo a Ver�nica que hab�a
regresado y nos miraba desde el ba�o, nos miraba extasiada, con una mano en su
chorito masturb�ndose y con cara de sorpresa, le hice se�as que se quedara ah�,
mientras yo empujaba a Pilar a nuestra cama mientras le iba levantando su
vestido y metiendo las manos por el el�stico de su calz�n, ella colgaba de mi
cuello sin despegar su boca de la m�a y recibir mi lengua que jugaba con la de
ella, tocaron sus piernas en el borde de la cama y la fui depositando de tal
manera que no viera a la puerta del ba�o, para dejarle libre el espect�culo a
Ver�nica.
Me fui colocando encima de Pilar sin dejar de besarla
mientras la iba desvistiendo, quiso oponer resistencia en un principio, pero al
meterle la mano por el calz�n nuevamente y apresar su vagina, que chorreaba de
jugos exquisitos, se aflojo y me dej� desvestirla por completo, fue dif�cil
sacarle su vestido, sost�n y calz�n casi sin dejar de besarla, la sensaci�n de
estar desnudo abrazado a ella y que Ver�nica nos mirara, me hizo perder
cualquier conciencia de que hacia, segu� besando su cuello sus hombros sus senos
duros, con unos pezones peque�itos, rosados que semejaban casi una manchita, su
est�mago hasta llegar a su chorreante y ardiente choro que comenc� a lamer con
placer hasta tomar con mis labios un insipiente cl�toris que se contrajo al
contacto de mi lengua, haciendo que Pilar se retorciera y lanzara unos grititos
de gusto alcanzando un orgasmo que la dej� un poco lacia, motiv�ndome a
continuar con el tratamiento, la di vueltas y langueti� su ano que hizo escapar
nuevos quejidos de placer me encaram� besando su espalda hasta quedar
arrodillado con mi pico entre sus nalgas, a las que le echaba bastante saliva
para que resbalara a todo lo largo de su raja, Ver�nica miraba masturb�ndose, y
por lo que me cont� despu�s, tuvo varios orgasmos viendo ese espect�culo. Le
hice se�as que se acercar� pero no quiso, tome a Pilar y la di vueltas quedando
yo encima nos fundimos en un beso eterno mientras hurgaba con mi mano en su
chorito, que me admir� lo mojado que estaba, sus l�quidos ya corr�an por sus
piernas hasta mojar la cama, tom� mi pico y se lo puse en la entrada de la
vagina empujando poco a poco, sin dejar de besarnos al momento que le entr� la
cabeza del pico, Pilar se encogi� y me enterr� las u�as en la espalda, fui el
primer hombre en entrar en ese cofre h�medo, caliente, lleno de pasi�n y placer,
al momento de ser desflorada tuvo un orgasmo con grititos y quejidos entre dolor
y placer, m�s esto �ltimo que lo primero. Segu� presionando hasta ten�rselo
entero metido, sent� su pelvis en la m�a, quise empujar mas pero no pod�a, a�n
con nuestras lenguas enlazadas, me separ� un poco y le mir� la cara, que era de
placidez, goce y dolor pues le corr�a una l�grima por la mejilla, me tom� y me
dio un beso en la frente, dici�ndome gracias, lo amo Don. Ra�l. Yo hacia
tremendos esfuerzos para no acabar y seguir gozando de ese cuerpo joven,
ardiente a tal punto que me olvid� un momento de Ver�nica, que se hab�a sacado
el buzo quedando desnuda, casi desmayada en la puerta del ba�o con tantos
orgasmos que hab�a tenido, miraba embelezada lo que suced�a en su cama. Le ped�
con la vista, mas bien le rogu� y supliqu�, que se acercar�, lentamente como por
inercia comenz� a moverse en direcci�n a nosotros, mientras yo tomaba la cabeza
de Pilar para que no mirara y no sintiera que Ver�nica se acercaba, lleg� por
detr�s de ella mirando de cerca como yo besaba a la chiquilla que se retorc�a
con el pico metido entero y chorreaba de jugos.
Sin dejar de besar a Pilar, levant� una mano y le tom� una a
Ver�nica, acerc�ndola a nosotros, tiritaba de calentura y de temor, la hice
hincarse en la cama, le tom� la cabeza , solt� la boca de Pilar y bes� la boca
de Ver�nica, y ah� Pilar se dio cuenta que mi esposa estaba al lado nuestro, se
asust�, quiso arrancar, pero la sujet� y le dije, c�lmate no hay problema, por
favor no temas, nada pasar�, se seren� un poco pero qued� entre sorprendida y
dubitativa, solo se termin� de calmar cuando Ver�nica le hizo cari�o en la cara
y le dijo, calma nada va a pasar sigan gozando y se sent� al lado nuestro
contemplando como se lo ten�a metido a Pilar. Me fui saliendo de encima y
bes�ndole todo el cuerpo baj� hasta el chorito, mir�ndolo un poco hinchado, rojo
y mojado de una manera incre�ble, tome una mano de Ver�nica y se la puse en un
pecho de Pilar, ambas se sorprendieron, pero como yo segu�a aprisionando el
pecho de Pilar con la mano de Ver�nica, se fueron dando las dos a lo que yo
quer�a hacer, las puse una acostada al lado de la otra, para poder pasar de un
choro a otro, cual de los dos estaba m�s mojado, a tal punto que mi cara estaba
empapada de jugos vaginales.
Tan absorto estaba en mi juego que de repente miro hacia
arriba y veo que Ver�nica le esta besando los pechos a Pilar, y esta le tocaba
los senos a Ver�nica, me qued� observando un momento y luego me puse de tal
manera que Ver�nica me lo empezara a chupar, tomando la cabeza de Pilar la lleve
a que tambi�n lo chupara y con la mano lo sacaba de la boca de una y lo met�a en
la boca de la otra, casi a punto de acabar me sal� de esa posici�n y me centr�
en besar la concha de Ver�nica arrastrando a Pilar hacia abajo para que viera lo
que yo hac�a, hasta que poco a poco fui ubicando su boca en el entrepiernas de
Ver�nica, me qued� sorprendido con la facilidad que Pilar al yo empujar su
cabeza hacia la vagina, esta la empezara a succionar con una rapidez, su falta
de experiencia se supl�a por sus calentura, la dej� as� un rato pues sent� como
Ver�nica se ven�a con terribles quejidos y estertores, demostrando que hab�a
tenido un gran orgasmo, entonces le tome la cara a Pilar y le empec� a ense�ar
como se hacia, como deb�a tomar el cl�toris con la lengua y masajearlo con los
labios, lengua y dientes. Alumna avanzada sali� la chiquilla ya que Ver�nica
tuvo otro tremendo orgasmo.
Yo ya no daba m�s, les dije, ahora le toca a las dos
recibirme a m�, entonces las puse a las dos como perrito, poni�ndome yo por
detr�s de ellas, se lo met� primero a Ver�nica, lentamente sintiendo como
entraba, luego de bombear un rato, se lo met� a Pilar, que fue donde me
entretuve mas tiempo, sintiendo como gozaba esa ni�a, tom� las manos de Ver�nica
y la hice que le tocara el chorito a palpando como entraba y sal�a el pico,
Ver�nica caliente ya fuera de si, le empez� a buscar el cl�toris y se lo
manoseaba casi con crueldad, yo le dije, b�saselo, sin decir nada se coloc� por
debajo y se lo empez� a chupar, de tanto en tanto me sacaba el pico lo chupaba y
lo volv�a a meter, grit�, ven que te lo quiero meter, voy a acabar, me abalanc�
encima de Ver�nica y se lo met� de un viaje sintiendo como me sal�a el chorro de
moco inundando ese choro que estaba ansioso de pico.
Quedamos extenuados los tres, fundidos en un abrazo, mezcla
de cari�o, amor calentura, lo encerraba todo, despu�s de un momento, Ver�nica le
dice a Pilar, ven que te voy a ense�ar como se chupa, y se lanzaron las dos a
chup�rmelo hasta lograr que se pusiera erecto nuevamente, entre medio se besaban
ellas en la boca, se tocaban los senos y yo las hice tocarse las entrepiernas a
cada una dici�ndole, yo les voy a ense�ar a gozar, puse a Ver�nica encima de
Pilar y que quedaran toc�ndose pelvis con pelvis, las fui ubicando hasta que se
pudieron refregar los cl�toris mutuamente, lanzando gritos de placer y ambas
llegaron r�pidamente a un orgasmo. Yo sent�a la necesidad de acabar de nuevo por
lo que tom� a Pilar y trat� de met�rselo por el ano, pero luego de varios
intentos desist� porque era muy estrecha, as� que cambi� y se lo met� por la
vagina y empec� a mete y saca mientras Ver�nica besaba a Pilar y a mi y se
masturbaba, cuando ya sent� que acababa me lo saque la di vueltas y se lo met�
en la boca para acabar ah�, Ver�nica le dec�a, tr�gatelo, tr�gatelo que es rico,
Pilar como buena alumna se trag� casi todo el semen, diciendo que estaba rico.
Luego de un rato nos metimos los tres a la ducha donde seguimos haciendo cosas.
Pues bien ese d�a no se hizo aseo, almorzamos una pizza
solicitada por fono, fue un d�a s�bado distinto, maravilloso. Dieron las cuatro
de la tarde y Pilar se retir� a su casa con besos m�os y de Ver�nica. En la
noche nuevamente tuvimos sexo con mi esposa pero fue diferente ambos nos
hab�amos sacado un gusto distinto, como pareja nos unimos m�s que nunca,
relaci�n que aun mantenemos. Con la madre de Pilar llegamos a un acuerdo y ella
manda a su hija sola s�bado por medio, d�a que no se hace aseo, no se ordena, no
se plancha, solo se hace sexo, sexo y sexo.
Han pasado tres a�os, Pilar ha conocido un muchacho con el
cual quiere casarse, nosotros la adoramos, pero no nos oponemos a su idea, si
seremos los padrinos de la boda, le hicimos una maravillosa despedida de
soltera, y�ndonos los tres a un hotel a Vi�a del Mar durante un fin de semana,
en que nos dimos con todo, yo logr� met�rsela por el ano, se lo romp� pero qued�
feliz por que a pesar del dolor goz� de maravillas, con Ver�nica tuvieron sexo,
perd�n se amaron, fue una despedida triste, a pesar de que quedamos de vernos en
alguna oportunidad, ojal� se cumpla, felicidades Pilar.
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Relato: Pilar
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