Relato: Las diferencias que despiertan morbo Desde hace mucho tiempo vengo notando como las diferencias f�sicas entre un hombre y una mujer cuando �stas son muy dr�sticas y marcadas provocan en la gente que las observa mucho morbo y un deseo sexual arrebatador y morboso. Esto lo digo porque yo diario vivo esta experiencia, me llamo Natalia soy colombiana, tengo 28 a�os mido 1.88 m peso 80 kg soy blanca, mis ojos son caf�s y mi pelo es casta�o y largo hasta abajo de mis senos. Tengo 2 a�os de casada con un hombre peruano siboney que mide 88 cm, es mulato obscuro, tiene las piernas cort�simas y los brazos muy largos, sus manos casi llegan al suelo, se ve muy cabez�n ya que su cabeza es de tama�o normal, adem�s �l tiene 62 a�os de edad. Como ver�n las diferencias f�sicas entre mi marido y yo son abrumadoras. En la calle todos se nos quedan viendo y he llegado a escuchar comentarios muy ofensivos sobre qu� vi yo en un enano tan feo y deforme como ese siendo como soy. En una ocasi�n nos lleg� a la casa una invitaci�n para participar en un programa de televisi�n por cable sobre las parejas disparejas, nos ofrecieron una buena cantidad de dinero, as� es que aceptamos y fuimos. Al llegar nos pasaron a un camerino y a mi me vistieron con una minifalda cortita arriba del medio muslo, unas sandalias de tac�n alto de aguja de 12 cm y me dejaron mis piernas sin medias, al natural, me soltaron el pelo para que se apreciara lo largo que lo tengo y a mi marido s�lo le pusieron unos calzoncillos y unos huaraches. Nos pasaron al estudio y en cuanto aparecimos se escucharon en el p�blico del foro expresiones de asombro, la conductora que era una mujer como de 1.65 m y rubia despu�s de saludarnos nos hizo varias preguntas acerca del sexo, de como lo hac�amos con la tremenda diferencia de estatura, se puso de pie y le pidi� a mi marido se le pasara por en medio de las piernas y por debajo de su vestido que le daba a medio muslo, mi marido me mir� y yo le dije que estaba bien, �l se pas� entre las piernas de la conductora y al hacerlo se escuch� la griter�a de la gente que ped�a que ahora se pasara por en medio de mis piernas, as� es que la conductora me pidi� me pusiera de pie y abriera las piernas, yo obedec� y le ped� a mi marido que se pasara debajo de mi, �l s�lo tuvo que bajar levemente la cabeza para colocarse entre mis piernas y debajo de mi falda, cuando lo hizo me acarici� las piernas y la conductora le pregunt� de que color eran mis pantaletas, �l contest� que verdes las cuales contrastaban con mi minifalda amarilla. El p�blico estaba enloquecido viendo a mi marido entre mis piernas abiertas y le ped�an me bajara las pantaletas. En el primer comercial nos largamos del estudio de televisi�n y nos fuimos directo a nuestra casa. Algunos d�as despu�s nos llegaron fotos de nuestra aparici�n en televisi�n donde se ve claramente a mi marido entre mis piernas y debajo de mi falda y como sus manos acarician mis piernas, junto con estas fotos llegaron invitaciones para presentarnos en estudios de grabaci�n de pel�culas porno donde a mi marido pretend�an aparearlo con mujeres rubias de mi estatura e incluso m�s altas que yo y a mi me quer�an aparear con enanos de circo cuya estatura oscila entre los 65 y los 80 cm. Es realmente sorprendente ver como una pareja cuando no es igual al resto llama la atenci�n de inmediato y despierta el morbo m�s intenso y m�s despiadado posible. Nuestra situaci�n econ�mica no es buena, sin embargo jam�s aceptamos esas invitaciones y nos conformamos con lo que tenemos y disfrutamos mucho mi marido y yo del sexo que tenemos y ya que hablo de esto, para despertarles m�s morbo voy a describirles como es el �rgano viril de mi marido. Su verga cuando est� parada mide 9�" de largo y 1�" de grueso, el tronco es muy grueso y muy negro y por una enfermedad que tuvo de ni�o se le ve agrietada, la cabeza es muy grande roja y puntiaguda y por la misma enfermedad tiene muchos granos en toda su superficie, pero no se confundan su verga est� muy sana. Ahora, a mi marido lo que lo enloquece de mi, la parte de mi cuerpo que lo vuelve loco son mis piernas y s�, para �l siempre me visto con minifaldas o vestidos cortitos a medio muslo, sandalias de tac�n alto de aguja de 12 cm y siempre ando sin medias, �l se coloca entre mis piernas y debajo de mi falda y durante largo rato est� ah� mirando mis pantaletas mientras acaricia y besa mis piernas por adelante y por detr�s y a todo lo largo de ellas, despu�s yo me tiendo en la cama y espero a que �l me baje las pantaletas y lo veo as� enanito como est� acomodarse entre mis piernas y colocar la cabeza de su verga en la entrada de mi concha, yo le pongo mis manos en su cabeza acariciando su pelo crespo y siento como me ensarta con su vergota hasta met�rmela toda completita haci�ndome gritar primero y gemir despu�s de placer y as� dura largo rato dentro de mi frotando su �rgano largo grueso poderoso con mucha fuerza hasta que siento como se pone r�gido y empieza a arrojarme abundantes chorros de semen blanco pastoso y muy caliente dentro de mi agujero. Quieren saber que vi en ese enano para que se convirtiera en mi marido, pues que una vez en un d�a de campo me dijo que le permitiera tantito que iba a orinar y sin que �l se diera cuenta lo segu� y lo espi�, ah� vi su tremenda verga y me enamor� de �l enseguida, de hecho en ese d�a de campo me cogi� por primera vez y despu�s de esa experiencia vivo perd�damente enamorada de mi enano feo, deforme, negro y poseedor de una vergota formidable que me vuelve loca, as� es que como ver�n �l enloquece con mis piernas y yo enloquezco con su verga. Nuestras enormes y marcadas diferencias f�sicas que tanto morbo despiertan en la gente que nos ve, a nosotros nos permite darnos un enorme placer sexual y hacer realidad muchas fantas�as tanto m�as como de mi marido.
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Relato: Las diferencias que despiertan morbo
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