El d�a siguiente hable con Osvaldo que se mostr� agradecido
de que le haya conseguido a alguien de confianza, me comento lo que pensaba
pagarle. Est�bamos cerca de fin de a�o, era laboralmente buena la �poca y agreg�
que si era mi novia no deb�a ser ninguna boludita. Ma�ana mismo puede empezar,
que venga con vos en la ma�ana yo los veo y me voy que tengo que hacer unos
tr�mites.

Esa noche salimos a cenar con Romi y a festejar, la pasamos
b�rbaro y tratamos de no acostarnos muy tarde, porque al d�a siguiente empezaba
y estaba un poco nerviosa. A la ma�ana siguiente se visti� normal, lo que en
Romi significa siempre alg�n pantal�n que le marque bien el culito con alguna
tanguita enterrada en �l. Subimos a la moto y Ro me abraz� desde atr�s me
apretaba fuerte y me dec�a fuerte al o�do que me amaba que era el ser m�s
maravilloso de la tierra y cosas por el estilo, me sent�a como en una pel�cula
de h�roes, por primera vez en mi vida me sent�a plenamente feliz. Entramos a la
oficina, Osvaldo la vio a Romi y lo vi impactado, no la conoc�a y el puta�ero
que llevaba dentro tomo nota en el momento de lo buena que estaba mi chica.
Pasamos a su oficina que s�lo tiene un escritorio, un par de butacas, la PC, el
tel�fono y no mucho m�s.

Bueno, dijo Osvaldo, ahora no hay mucho trabajo. Tengo que
salir, te pido que le expliques un poco vos el laburo, que yo tengo cosas que
hacer, no te hagas problemas por el d�a de laburo que te lo pago como si
laburaras en la moto me dijo y me restreg� sus nudillos cari�osamente por la
cabeza como siempre hac�a, le dije que se dejara de joder, que no hac�a falta
que me pagara nada.

Le empec� a explicar a Romi el trabajo y despu�s de un rato
ella se fue soltando y empez� a tomar los pedidos con bastante cancha, m�s tarde
me dijo: �no te gustar�a cogerme ac� en la oficina de tu jefe?, cerramos la
puerta y te desquitas de cuando se cog�a a esa perrita y vos te pajeabas del
otro lado. �Quer�s, dijo mir�ndome con su cara de putita. Cerr� la puerta y la
puse apoyada con la pancita en el escritorio, le desabroche el pantal�n y se lo
fui bajando despacito, me impacto verla as� ofrecida sobre ese escritorio, su
tanga incrustada en su culo, la desencaje un poco y la corr� a un lado, baje el
cierre de mi pantal�n y empec� a jugar con la cabeza de mi pija por su conchita.
Son� el tel�fono y romi atendi� con naturalidad, se la deje ir despacito y
empec� a bombearla suavemente.

-Mira que puede volver Osvaldo y se va a enojar si no me
encuentra trabajando..., es mi primer d�a de trabajo, amor... que le dir�a a mi
jefe si me encuentra as�...�eh?

-Y te gustar�a que te encuentre as�...?

-Si pero vos no tendr�as que estar..., quiz�s as� apoyadita
en el escritorio atendiendo alg�n tel�fono..., �crees que me ayudar�a como haces
vos?.

Me sal� y la hice girar la sent� sobre el escritorio y cuando
se la iba a poner escuchamos la puerta del departamento, nos arreglamos la ropa
r�pidamente. Cuando Osvaldo entr� est�bamos todo colorados. Hace mucho calor ac�
adentro, dijo, voy a abrir un poco la ventana. Tome uno de los pedidos que hab�a
tomado Romi y sal� a laburar. En la calle pensaba que estar�a pasando en la
oficina, si estar�an hablando y de que, mi cabeza trabajaba a mil kil�metros por
hora. Pude reci�n volver a la tarde a �ltima hora a buscarla, cuando bajo, me
beso, se subi� a la moto y abraz�ndome otra vez desde atr�s me dijo que me amaba
m�s que a nada en el mundo.

Fuimos lento hasta casa disfrutando de nuestro contacto. En
la cena le pregunte que tal con Osvaldo y me dijo que todo bien, que si quer�a
saber m�s en la cama me contaba, me miro con una cara de traviesa que pone y que
me encanta. Miramos un rato de tele y nos fuimos al cuarto. Primera se fue Romi,
cuando entr� al cuarto estaba desnuda sobre la cama, su conchita estaba
afeitadita como siempre, me puse a chuparla suavemente como se que le encanta la
miraba a los ojos y ella me sonri�. No pas� casi nada con Osvaldo, estuvo un
ratito y tuvo que salir de vuelta. me dijo y sonri�.

-�Y en el ratito que estuvo, paso algo?

-Nada amor, solo me charlo bastante y me mir� el culo cada
vez que pudo..., creo que ya lo puede dibujar de memoria...

me puse sobre ella y la empec� a coger suavemente. Me miro
con esos ojos que son mi obsesi�n y me dijo, nada tontito solo estuvo estudiando
el terreno..., dec�a con vos de putita, viendo que me gusta..., que no..., y
evaluando hasta donde puede llegar...,

-�Y vos que hiciste?

-Y le contestaba a veces enojada..., pero siempre dejando que
notara que mi cuerpo manifiesta que soy una perrita... y que las perritas....

-�Las perritas que?

-No podemos negarnos a nada cuando estamos calentitas, me
dijo y explote en lo profundo de su concha, al tiempo que ella tambi�n llegaba y
nos abraz�bamos y nos bes�bamos apasionadamente. Te amo, mi amor, le dije. Sos
lo m�s importante de mi vida. Nos quedamos otra vez hasta muy tarde, charlando,
bes�ndonos y jugando con nuestros cuerpos, sent�amos calor de hogar y est�bamos
agradecidos de habernos encontrado.

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